El FC Cartagena vuelve a salir triunfante de La Rosaleda

Murcia

El FC Cartagena volvió al escenario donde empezó todo, el lugar en el que se metió en el bolsillo un ascenso a Segunda División. En este caso, el rival fue el Málaga y, aunque el Efesé empezó mimando el balón y haciendo buena su posesión, en cuanto los andaluces llegaban al área rival generaban peligro.

La primera de todas fue de Orlando Sá, el portugués remató solo libre de marca aunque su finalización no fue trascendente. Este fue el primer aviso, pero el equipo albinegro se reactivó rápidamente con una llegada por banda de David Simón que los andaluces tuvieron que desviar a córner.

El gran mazazo llegó en el 17, Cristian Rodriguez chutó tras una gran ocasión del Málaga en un saque de esquina. El futbolista golpeó la pelota, que pegó en el larguero, luego en Marc Martínez y entró en la portería. Ahora el Cartagena tenía que remar para empatar.

Afortunadamente llegó el momento de la pausa y la calidad. Fue en el minuto 28, Álex Gallar puso la jerarquía con un golazo que se sacó de la chistera. El Efesé lo tenía todo para volver a coger el pulso al choque y controlar mejor el partido hasta que, sin más ocasiones claras, se llegó al descanso.

En la segunda mitad salió más despierto el Cartagena, con más mordida y juego combinativo que funcionó en el esquema de Borja Jiménez. Entre Gallar haciendo diabluras en banda, Elady bajando a recibir y repartir el último pase y un Nacho Gil más descarado, llegó el gol del Efesé. Jugada trazada para que el de Jaén asistiese a De La Bella que, con la zurda, batió la meta del Málaga en el 57.

Con todo controlado, Jack Harper salió al césped por Rubén Castro, un cambio natural motivado para aguantar la presión y hacerle daño al rival a la espalda. Era síntoma de que el técnico albinegro no quería quedarse en retaguardia como en otros partidos.

Conforme corría el reloj, el Málaga empezó a apretar al Cartagena en la medular, pero los visitantes contuvieron muy bien la presión blanquiazul. Sin mayores consecuencias ni llegadas de peligro, el conjunto de la ciudad portuaria fue matando el partido con acometidas en banda y los cambios en el tramo final. Aguza y Cayarga entraron al verde pasado el 85 y se fueron Gil y Elady.

Subiendo la temperatura con algunas entradas peligrosas fruto de un partido cargado de revoluciones, los instantes finales se desorbitaron con algunas imprecisiones que sumaron en la cuenta atrás de La Rosaleda, pero no en el marcador. Grandes tres puntos para un Cartagena que se mostró más sólido que en otras ocasiones.