Selecciona tu emisora

Ir a la emisora
PerfilDesconecta
Buscar noticias o podcast

Documentos de la Comunidad de Madrid proponen mezclar en el Zendal pacientes estables y de cuidados paliativos

La Consejería de Sanidad niega que se trate de un protocolo y asegura que es "una propuesta de criterios" que no se está aplicando

Documento que recoge la idea de juntar a los pacientes sin tener en cuenta su estado. / Cadena SER

Documento que recoge la idea de juntar a los pacientes sin tener en cuenta su estado.

Madrid

El gobierno de Isabel Díaz Ayuso vuelve a tropezar con los protocolos, esta vez con los criterios para trasladar a los pacientes con COVID-19 que llegan a las Urgencias de la red hospitalaria hasta el nuevo hospital de emergencias. Aparecen en un documento con fecha del 2 de diciembre -según la Consejería de Sanidad- y que se titula ‘Información dirigida a gerentes de hospitales en relación a la inminente apertura del Hospital de Emergencias Enfermera Isabel Zendal (HEEIZ)’.

El documento categoriza los pacientes en cinco grupos, identificados con números del 1 al 5, y establece cuáles de ellos son susceptibles de traslado -siempre voluntario- al centro de Valdebebas. Básicamente son dos: los que están estables -y no es previsible que vayan a precisar ingreso en la UCI-; y aquellos “con mal pronóstico” que, en caso de empeorar, no serían candidatos a entrar en una unidad de críticos -generalmente personas de edad avanzada o con una enfermedad previa grave-. Se trata, por tanto, de pacientes con cuadros clínicos muy diferentes que -según este documento- se trasladarían al mismo complejo, el Isabel Zendal, concebido como pabellones abiertos -con 48 camas por cada unidad de enfermería-.

“Derivar a pacientes que están en sus últimos momentos de vida a un hangar como el Isabel Zendal es una auténtica aberración”, asegura Alda Recas, presidenta de la Asociación Madrileña de Enfermería (AME). Su organización pide “cubículos separados” para estos pacientes y sobre todo “personal cualificado para ese acompañamiento en los últimos momentos porque se necesita medicación y formación específicos”, añade Recas. La plantilla del Zendal, más allá de los 106 sanitarios aptos que se han presentado al proceso de adscripción voluntaria, es de momento un misterio. La Consejería ha dicho que "se irá activando progresivamente en función de las necesidades asistenciales”. Sí se sabe que se tirará del personal eventual -con contrato de refuerzo ante el COVID- y que llamarán primero a los que tengan una antigüedad menor en el centro al que están adscritos.

El departamento de Enrique Ruiz Escudero, a través de un portavoz, niega que se trate de un protocolo, sino que es -asegura- “un documento informativo”. Rechaza además que tenga carácter definitivo o que se esté aplicando en estos momentos. Para estas fuentes es simplemente “una propuesta de criterios, que no tiene traducción en la práctica clínica”, insisten. La Cadena SER pidió esté lunes concreciones a la Consejería de Sanidad sobre la administración de cuidados paliativos en las instalaciones del Hospital Enfermera Isabel Zendal sin conseguirlas. La respuesta fue en negativo: “esos pacientes no van a compartir espacios”, afirman esas fuentes, pero no ofrecen más detalles. Lo que es seguro, es que en ningún momento se ha consultado a la Sociedad Madrileña de Cuidados Paliativos, tal y como confirman fuentes de esta sociedad científica.

Sanidad tampoco ha distribuido entre los medios un documento oficial alternativo que recoja cuáles son actualmente los criterios de derivación al hospital de emergencias. Asegura, vía comunicado, que “se va a trasladar a todos los pacientes leves y graves con coronavirus, susceptibles incluso de recibir cuidados intensivos”, a pesar de lo que figura en este documento al que han tenido acceso la SER y otros medios. Esta versión contradice incluso de las declaraciones públicas del consejero y otros altos cargos, que siempre han limitado los traslados a “pacientes con buen pronóstico”.

Las categorías de paciente COVID-19

Existen cinco divisiones. El primero de esos grupos -nivel 1- sería el que tiene un cuadro médico más grave, el que necesita valoración inmediata por la UCI. El 2 y el 3 son dos grupos con una situación clínica similar: ambos tienen “altos requerimientos de oxigenoterapia, así como factores analíticos y radiográficos de mal pronóstico”, describe el documento. ¿Cuál es la diferencia entre ambos? Básicamente que un enfermo del grupo 2 es candidato a ingresar en cuidados intensivos, “si presenta mala evolución”, se detalla. En esas mismas circunstancias clínicas un paciente del grupo 3 “sería candidato -dice el texto- a desintensificación terapéutica garantizando la atención paliativa”. Es decir, son aquellos a los que se les reduciría, o se les retiraría el tratamiento, para evitar el encarnizamiento terapéutico. En su lugar, recibirían cuidados paliativos.

Los otros dos grupos son los que presentan “bajo riesgo para ingreso en la UCI por estabilidad clínica -pacientes nivel 4-" o aquellos que no cumplen “criterios de ingreso hospitalario -pacientes del grupo 5”. En el nivel 4 la Consejería establece dos subgrupos sin una finalidad explícita en el documento: el 4A, que son los que tienen una buena salud; y el 4B, que agrupa a quienes presentan “una enfermedad terminal de órgano y una expectativa de vida inferior a un año”, dice el protocolo. El citado portavoz de la Consejería de Sanidad no ha explicado tampoco la finalidad de estas subdivisiones.

La Consejería solo fija dos categorías de enfermos como candidatos a esas derivaciones al Zendal, los del grupo 3 y 4. Es decir, los que pasarían directamente a cuidados paliativos, en caso de empeoramiento; y los que necesitan hospitalización, pero a priori se espera que sigan estables. Estos últimos serían los que se beneficiarían de alguna de las 48 nuevas UCI que incorpora el hospital de emergencias, en el caso improbable de que sufran un deterioro súbito e inesperado. Se contempla que también pueda trasladarse a pacientes del grupo 5 “excepcionalmente”, si así lo considera el médico.

La Consejería de Sanidad siempre ha dicho que el hospital -como ocurrió en IFEMA- no está pensado para los pacientes más complejos, aquellos que por su situación clínica van a precisar probablemente ingresar en una UCI. Esos seguirán tratándose en los hospitales generales. El objetivo del Zendal -han explicado en numerosas ocasiones los responsables de la Comunidad- es “aliviar” a esos centros convencionales de pacientes agudos, pero estables. Lo que no se había dicho hasta ahora es que también se iba a derivar a pacientes más complejos, aquellos que -según reza este documento- presentan “factores analíticos y radiográficos de mal pronóstico”, pero que no son susceptibles de seguir con tratamientos más invasivos -como los que se administran en las UCI-.

Javier Alonso

Javier Alonso

Periodista. Licenciado por la Facultad de Ciencias de la Información de la Univesidad Complutense de...

 

Directo

  • Cadena SER

  •  
Últimos programas

Estas escuchando

Hora 14
Crónica 24/7

1x24: Ser o no Ser

23/08/2024 - 01:38:13

Ir al podcast

Noticias en 3′

  •  
Noticias en 3′
Últimos programas

Otros episodios

Cualquier tiempo pasado fue anterior

Tu audio se ha acabado.
Te redirigiremos al directo.

5 "

Compartir