PP y Ciudadanos presentan el presupuesto "más dialogado" y "centrado" para hacer frente a la pandemia

Alicante

El bipartito de PP y Ciudadanos ha presentado el anteproyecto de presupuestos de la Diputación para 2021. Un total de 280 millones de presupuesto consolidado (que incluye a los organismos dependientes de la institución), que irá a su aprobación el próximo día 30 y que previsiblemente contará con el respaldo de la oposición.

Unas cuentas en las que la novedad serán los 30 millones de remanentes de Tesorería que podrá incorporar la institución provincial para lograr una capacidad de 310 millones para inversiones, asistencia social y ayudas que frenen el impacto de la pandemia. Y que suponen respecto al año anterior un aumento de los ingresos en un 6,8% por el incremento de los tributos del Estado, y de un 8,8 en gastos, que se destinará a esas necesidades.

Presupuesto "dialogado", decía el diputado de Economía del PP, Eduardo Dolón, porque han incorporado casi todas las demandas de la oposición (PSPV y Compromís), tasadas en un millón de euros. "Lo que no esté en el presupuesto ordinario estará en el acuerdo de remanantes", que esperan firmar la próxima semana, aclaraba Dolón.

Y para Javier Gutiérrez, de Ciudadanos, son unos presupuestos "centrados" que "harán avanzar" a los municipios pese a la pandemia, con un aumento del 15% específico para los ayuntamientos, plasmados en 102,3 millones de euros, sobre todo para Emergencias, Planes y Obras municipales. Al apartado social se destinarán globalmente 36 millones, 2 más que el año anterior.

En cuanto a la inversión por áreas, encabeza el ránking infraestructuras, con 37 millones, seguida de Carreteras, con 29. Y en Cultura y Deportes, con 21 y 6 millones respectivamente -los sectores que peor lo están pasando, coinciden ambos-, se reforzarán las convocatorias y se introducirán otras nuevas para paliar la recesión por la crisis sanitaria.

Mazón saca pecho del previsible consenso en la aprobación

Precisamente en Valencia, el presidente de la Diputación, Carlos Mazón, sacaba pecho por ese previsible consenso que se espera en la aprobación de estas cuentas, en contraste con la situación del Ayuntamiento de Valencia o de la propia Generalitat, donde ese acercamiento entre PP y Compromís, decía, no se ha dado por falta de responsabilidad de los gobiernos respectivos, que son los que tienen que tener "voluntad de pactar". Mencionaba directamente al president Puig del que, dice "recibe solo a una parte de la oposición".

En Alicante, reconoce, "hay buena predisposición", pero el máximo responsable es el que debe hacer el "esfuerzo" de llegar a acuerdos y "marcar la pauta" y la muestra es que el 100% de las medidas para paliar los efectos de la pandemia ha salido adelante por unanimidad por esa voluntad, afirma.

Mazón, que ha firmado en el Palau de la Generalitat un convenio marco de colaboración que impulsa la consellera de Transparencia, Rosa Pérez, para adherirse a la alianza de buen gobierno, también ha alardeado de su buena coordinación con la presidenta local del PP en Valencia, María José Catalá. No descarta presentar con ella las campanadas de Nochevieja, ha dicho en tono de broma.