Desconcierto y preocupación entre los baleares ante el aumento de contagios
Críticas a las instituciones y a la relajación de algunos ciudadanos

Residentes paseando por la calle Sant Miquel, en el centro de Palma, este miércoles. / Cadena Ser.

PALMA
Desconcierto y preocupación entre los ciudadanos de las Islas. El aumento exponencial de los contagios en Balears ha sorprendido a instituciones y residentes. Y es que hemos pasado de ser la comunidad con la incidencia más baja a ser el territorio más golpeado por la COVID en todo el país.
En La Ser hemos salido a la calle para preguntar a los vecinos cómo afrontan esta situación. Muchos no entienden por qué los contagios aumentan a pesar de todas las medidas de seguridad y restricciones y se preguntan si realmente funcionan.
"El Gobierno yo creo que desde el principio no lo ha hecho muy bien, a la vista está: las cosas no van como debieran", critica Margalida, una vecina de Palma. "Si se hubieran tomado medidas más duras tendríamos menos contagios, pero, claro, la presión de la hostelería...", opina Antonia, otra palmesana.
Sin embargo, Fernando tiene otra teoría sobre cómo Balears ha llegado hasta la actual situación epidemiológica: "En Balears siempre vamos un poco por detrás del resto de la Península, al ser una isla...Es fácil que esta segunda ola, que sufrieron en la Península hace un mes y medio, esté llegando aquí con retraso".
Aunque no todos culpan a las instituciones. De hecho, gran parte de los ciudadanos achaca el aumento de contagios a la relajación de algunos: "Se vendía que en Baleares estábamos muy bien y la gente se confió. Pierdes el miedo y empiezas a ver a algún familiar o amigo más...", recalca Ana.
"Entiendo las medidas que han impuesto, pero no sería necesario que fuesen tan estrictas si la gente realmente hiciera caso y fuera consciente de lo que está pasando", concuerda Mónica, amiga de Ana. "No estamos cumpliendo las medidas de distanciamiento. Hay una necesidad de estar en la calle, en los bares...", señala Gladis.
Y preocupación ante lo que se avecina, con la Navidad a menos de diez días. Hay quienes temen una tercera ola y optan por restringir al máximo su vida social y tomar más precauciones para evitar contagiarse.
Desaliento también entre muchos, al ver pocos resultados tras meses de limitaciones. Y no estamos en el pico. Advierten desde la Conselleria de Salud que se espera que en las próximas semanas sigan aumentando los casos. Según sus estimaciones, no será hasta enero cuando mejoren los datos epidemiológicos.




