Derrota con posesión infernal

Vigo

El Celta tuvo la posesión. Pero solamente eso. Sostenía Denis Suárez al término del partido que había sido una posesión o un control del partido estéril, plano. Y eso resume lo que uno quiso y lo que su rival también le permitió. El equipo del Chacho Coudet tuvo un 60% de posesión contra el Real Madrid como visitante. Pero muy pocas llegadas y muy pocas veces inquietó la portería de Courtois. Faltó profundidad y sobró lucimiento en medio de esa permivisidad de un Madrid replegado que se encontraba cómodo ante esa posesión infernal o infernalmente estéril del Celta. El partido se define en dos momentos. Minuto 5, Aspas se queda solo, pica el balón delante de Courtois y salva bajo palos Nacho; en esa misma contra el Madrid encuentra a Asensio en banda izquierda, centra largo, se confía Olaza y marca Lucas Vázquez de cabeza. Del 0-1 al 1-0. Más grave fue lo de la segunda parte: minuto 6 Aspas se va solo por la banda y Nacho le barre y lo saca de campo. Amarilla para el central y lesión de Aspas. En la siguiente jugada, Murillo rifa un balón desde zona de centrales y Lucas Vázquez encuentra a Asensio para que remache el 2-0. Dos goles abajo y lesión de Aspas; habrá que ver si la factura del partido es muy cara o no, porque Nolito también se retiró con molestias o sobrecarga muscular. La posesión infernal del Celta no pudo con los ataques relámpago del Real Madrid que, sin público, se encontró muy cómodo en un ejercicio de contención futbolística desde que se puso 1-0 en el minuto 6. El jugar sin público también te permite muchas licencias como esta.

El Celta frena su racha de 5 victorias y un empate en los últimos 6 partidos y tiene que pensar ya en el partido de Copa del Rey contra el Ibiza el martes y la visita a Balaídos del poderoso Villarreal el viernes. No hay descanso, no hay tregua. El Celta tiene nuevo lateral izquierdo pero sigue sin delantero centro. Ahora urge todavía un poco más.