Los Reyes visitan la comarca respetando el protocolo
El Montecillo acogía una cabalgata insólita con todas las medidas anti-Covid y los Magos también recalaron en formato reducido en otras localidades como Roa o Torregalindo
RIBERA DEL DUERO
El estadio municipal El Montecillo se convertía este martes en el escenario de la recepción de los Reyes Magos de Oriente. Estas instalaciones municipales cumplían con la insólita función de acoger la cabalgata en el formato estático que ha impuesto la Junta de Castilla y León dentro de las medidas articuladas en estas navidades para evitar todo lo posible la propagación del Covid 19.
En dos pases, a las seis y ocho de la tarde, las gradas acogían a los varios cientos de familias que no han querido perderse la oportunidad de ver a Melchor, Gaspar y Baltasar en persona horas antes de que inicien su ardua tarea de repartir regalos por todos los domicilios.
Sus Majestades, guiadas por la estrella anunciadora, desfilaban por la pista que rodea al campo de fútbol entremezcladas con otras carrozas decorativas. Entre ellas las que diseñó y fabricó Nano Arribas Lázaro hace algo más de dos años y otras cinco que estrenaba en esta ocasión el Ayuntamiento, realizadas por Miguel Martinez Delso y personal de Servicios.
Después de dar tres vueltas al perímetro del campo, Melchor, Gaspar y Baltasar descendían de sus habitáculos para encaminarse al centro del terreno de juego y dirigir unas palabras a los niños y niñas de Aranda.
“Ya sabéis que no es el tamaño del regalo lo que importa, sino el del corazón de quien lo reparte y no hay mejor regalo que la sonrisa y el cariño de la gente que nos quiere”, decía Gaspar para terminar su discurso antes de despedirse deseando “salud y prosperidad para todos vosotros y vuestras familias”.
Este nuevo modelo de cabalgata se llevaba a cabo con invitación y control del aforo, cumpliendo con las medidas preceptivas de toma de temperatura e higiene de manos con hidroalcohol a la entrada de las instalaciones. Voluntarios de Protección Civil colaboraban con la Policía Local en las tareas logísticas, utilizando el recinto ferial como aparcamiento para el público asistente, que podía dirigirse desde allí por la pasarela que cruza la carretera.
Las gélidas temperaturas de esta víspera de Reyes no han sido obstáculo para cumplir con una tradición, aunque en esta ocasión algo menguada por la necesidad de evitar aglomeraciones y el contacto físico por la cuenta que nos tiene a todos.
La cabalgata de Aranda no ha sido el único lugar de la Ribera del Duero donde se ha podido ver a los Reyes Magos. El Ayuntamiento de Roa también organizaba una recepción con todas las medidas de precaución para que los menores raudenses pudieran saludar a los Magos en el polideportivo Los Nogales.
La Asociación Conde Galindo organizaba un acto reducido a la mínima expresión, donde los Magos, con las ruinas del castillo de fondo pronunciaban también un pequeño discurso para los niños y niñas de Torregalindo. “Lamentamos mucho no haberos podido recibiros está en esta tarde en Torregalindo pero sabemos que habéis sido buenos”, comenzaba diciendo Melchor. “Esperemos que al año que viene os podamos ver en el belén viviente que se hace aquí en Torregalindo y sentir ese calor con el que nos acogéis”, continuaba Gaspar para finalizar Baltasar recomendando irse pronto esta noche a dormir “para que nos de tiempo a visitaros a todos”.