Alcaldes sin vacuna

Valencia

Reconozco que he cambiado de opinión en el tema de los cargos públicos que se han colado en la vacunación. Cuando salió el primer caso de los alcaldes socialistas que se vacunaron sin ser grupo prioritario, sinceramente pensé que sería un hecho aislado. Fruto de la falta de un plan claro de vacunación que hubiese previsto qué hacer con las dosis sobrantes. Desde luego, visto lo visto, me equivoqué. Es la picaresca generalizada.

Así que me parece lógico que el presidente Ximo Puig haya ordenado que toda la gente que se vacunó antes de tiempo no reciba ahora la segunda dosis. Desde luego es tirar unas cuantas dosis a la basura, pero que casi 200 personas fueran a estar vacunadas por completo antes que población de riesgo también es indefendible.

Lo único positivo es el mensaje que se lanza contra los antivacunas: claro que merece la pena vacunarse, hasta hay políticos que se cuelan. Ahora bien, tampoco perdamos de vista que, a estas alturas, no es que no haya un calendario de vacunación, es que ni siquiera sabemos en qué orden se vacunará a toda la población.