El Alcoyano sigue en estado de gracia

Alcoy

Sigue de dulce el conjunto blanquiazul que ha derrotado, no sin apuros, a un Orihuela peleón por 2 goles a 0, obra de Jona, desde 25 metros con un lanzamiento con pierna izquierda, y Raíllo, que volvía a escena desde su lesión en La Nucía, cerraba el resultado con su tanto desde los once metros, tras ejecutar la pena máxima cometida sobre Mourad, en el minuto 85.

Esta victoria de los de Vicente Parras, junto a la derrota del Hércules, deja al Deportivo con los mismos puntos que el conjunto alicantino y abre brecha con los equipos de zona media de la tabla.

Volviendo al encuentro, el Alcoyano empezó con buen juego, tocando y tocando, ante un Orihuela que las veía venir, ya que no se encontraba cómodo en el césped de El Collao. Aunque no había claras ocasiones para los blanquiazules, se veía claramente la diferencia de actitud en ambos equipos; un equipo, el Deportivo, en estado de gracia y en una dinámica de juego imparable, ante un conjunto escorpión sin ritmo de partidos.

Y cuando todos esperaban el descanso, llegaría la jugada del partido. Un balón que robaba Jona en el centro del campo, se iba deshaciendo de rivales y, desde unos 20-25 metros, se sacaba un lanzamiento con pierna izquierda que sorprendía al portero rival, ajustado al palo derecho logrando el 1 a 0 en el marcador.

El descanso le fue mejor al Orihuela y aunque Vicente Parras fue el primero en hacer un triple cambio en la ventana, con la salida de Mourad, Daikite y Ángel, el conjunto escorpión empezaba a poner en entredicho el resultado con varias ocasiones que acechaban la portería de José Juan, que en el minuto 69 se lucía con una estirada, que evitaba el empate.

Y cuando el rival empezaba a agobiar con jugadas por banda y centro del campo, sobre todo con la entrada del incombustible Chechu Flores, en las filas del Orihuela, llegaba la jugada cumbre del encuentro. Robo de balón del Alcoyano, que llegaba a los pies de Mourad que se plantaba solo en el área rival y era cazado por un defensor escorpión, ante el que el árbitro no tuvo dudas y decretó la pena máxima.

Raíllo, muy seguro de sí mismo, cogía el balón en sus manos y desde los once metros lograba en el 87 el tanto, con un disparo seco y centrado. Así certificaba la victoria de los blanquiazules ante un Orihuela, desquiciado con el arbitraje y muy molesto por la pena máxima.

En definitiva, sigue la racha imparable de resultados en Liga del Alcoyano, que sigue sin perder en la competición casera desde diciembre, y se sitúa tercero, con los mismos puntos, que el Hércules de Alicante, que caía 2 a 0 en Atzeneta.