¿Volverán a retinglar los bolos en el microespacio de General Dávila 228?

Santander

Se trata de un proyecto de recuperación urbana, pero hay quien teme que con la actuación Santander se despida de otra de sus boleras “de toda la vida”. Hablamos del corro de la Asociación de Vecinos Juan Blanco, en las traseras al norte del paseo de General Dávila, a la altura del número 228. Su regeneración urbana se ha incluido en la cuarta edición de ‘Microespacios’, un programa que se lleva a cabo en colaboración con el Colegio de Arquitectos de Cantabria y permitirá poner en valor pequeños rincones de la ciudad que se encuentran degradados o desaprovechados. En la mente de todos está la desaparecida bolera de la Asociación de Vecinos de San Martín de la Mar, que dio paso a una plaza de privilegiadas vistas, pero sin sabor añejo, en aras del Mundial de Vela de 2014,

En Santander, según el censo que en 2005 hizo la Federación Cántabra de Bolos, hay unas 40 boleras, 20 de ellas sin actividad. José Ángel Hoyos, autor de ese inventario cuando era vicepresidente, nos ha contado en Hoy por Hoy Cantabria que esta bolera en concreto no cuenta con unas medidas aptas para la competición, pero si fue escenario de las primeras tiradas del campeonísimo, Óscar González. "Las boleras eran punto de reunión, las redes sociales de antes", nos ha explicado. "Me parece bien que se rehabilite este espacio, en Santander hay muchas en desuso y abandonadas, pero a mi la bolera que más pena me ha dado que desapareciese fue la de San Martín de la Mar".

Sobre la bolera, en desuso desde hace 20 años, se desarrollará el proyecto “¡Juega!”, del que se ha valorado su frescura en la consecución de mayores espacios deportivos gracias a la estrategia de trasladar la zona de tiro de la bolera al arranque de una pasarela que avanza hacia el norte del ámbito buscando las vistas sobre la zona Norte de Santander al asomarse hacia la avenida de los Castros. Los autores de esta propuesta son los arquitectos Lucas Peraita Dorado y Javier Torrado González.

Con esta iniciativa se da continuidad a un proyecto municipal puesto en marcha en 2016 que ha permitido mejorar pequeños rincones del Paseo de General Dávila, la Bajada de la Gándara, las calles San Sebastián, Juan de la Cosa y Fernando de los Ríos o las plazas de Amaliach y de la Leña, entre otros. En esta IV edición de los Microespacios se actuará, además, de forma progresiva en Antonio de Cabezón, la Bajada del Caleruco, la Avenida del Cardenal Herrera Oria y el entorno del lavadero del barrio Fumoril en Cueto, y contarán con una dotación presupuestaria de 55.418 euros.