¿Son suficientes las restricciones en Madrid?

Madrid

El Ejecutivo madrileño se resiste a adoptar nuevas medidas para frenar la expansión del virus en la región. Así lo ha manifestado esta mañana el vicepresidente Ignacio Aguado y lo ha refrendado en la 'Sesión de control al Gobierno' de La Ventana de Madrid el consejero de Transportes Ángel Garrido. Las medidas de la segunda ola "funcionaron bastante mejor que en otras comunidades", ha afirmado Garrido en el debate, al que ha acudido con Isa Serra, portavoz de Unidas Podemos.

Serra ha cargado contra contra en retraso en las medidas que ha adoptado la Comunidad porque "ya no sirven. Llegan muy tarde".  La portavoz de Unidas Podemos afea al Ejecutivo de Ayuso su negativa a extender las restricciones a tiempo y califica el Hospital Isabel Zendal de cortina de humo de la sanidad pública. "Les sirve para no hablar del estado del resto de hospitales".

El representante del Gobierno en el debate ha reivindicado el valor del Zendal, "un hospital de ladrillo", frente a las soluciones que han adoptado otras comunidades al levantar hospitales de campaña. "Si llega a ocurrir en Madrid que un hospital que atiende a personas con COVID-19 sale volando con el viento, montan una que no tenemos a dónde correr", ha dicho Garrido en referencia a lo ocurrido en Valencia, donde algunos pacientes han sido evacuados del hospital de campaña de La Fe por fuertes rachas de viento.

Las discotecas y la responsabilidad

La Comunidad de Madrid se desentiende del control de la actividad en las discotecas, a las que dio luz verde para abrir si ofrecían un servicio de restaurante. Tras polémicas como las de la semana pasada en el Teatro Barceló, Garrido ha señalado que controlar que se cumpla lo pactado, que funcionen como un restaurante, no es competencia suya. "No pertenece a la Comunidad, sino a la policía municipal de los diferentes ayuntamientos".

"Dictamos una orden para que se pueda actuar de acuerdo a un régimen de funcionamiento razonable", ha incidido Garrido, que ha vuelto a poner en valor la doble estrategia de su Gobierno, al evitar el total desgarro económico y, subraya, tomar a la vez medidas contra el coronavirus. El consejero de Transportes pide que "se les dé un palo bien gordo" a las discotecas que incumplan el decreto y presten un servicio distinto; pero apunta a la responsabilidad de los municipios.

"No tiene sentido que ustedes desregulen, que sea la ley de la selva y cada uno haga lo que quiera y luego tenga que ser la policía la que vaya a controlar", le ha reprochado Serra a este respecto.