Grandes héroes y heroínas

Córdoba

Suele pasar con frecuencia, que en tiempos difíciles, solo mencionamos las cosas negativas y, aunque es necesario recordar que debemos cumplir las normas sanitarias establecidas por el bien común y por el bien propio, también corresponde destacar aquellas cosas que además de sorprendernos nos pueden servir como ejemplo para dar esperanza y ver que es posible que la sociedad cambie. Ejemplo de ello son las niñas y los niños.

Durante el confinamiento, estuvieron encerradas, cada familia buscó la formula, no sólo para estudiar de una forma desconocida para ellas y ellos sino para entretenerlos, ocupando el tiempo en juegos y actividades nuevas y así el agobio fuera menor durante el encierro.

Finalizado el confinamiento, han vuelto a sus clases y verles como respetan las distancias, en clase y en el recreo, siempre con sus mascarillas, sin protestar, conscientes (a veces más que las personas mayores), que ahora eso es lo que hay; da esperanza.

Se levantan a las 7.45, entran a las 9 al colegio, siempre y cuando no vayan al aula matinal, porqué de ir, se levantan a las 7.

Durante 5 horas reciben todos los conocimientos que el profesorado les enseña, la mayoría de las veces con entusiasmo e ilusión, en el tiempo de recreo juegan, se relacionan, de vez en cuando también se pelean y siempre con una sonrisa.

Vuelven a casa, reponen fuerzas, hacen las tareas correspondientes y si pueden se van un ratito al parque. Siempre con sus mascarillas.

Lo aprendido durante este año lo recordaran, pero también les ha creado sentido de la responsabilidad. Ellos son también nuestros héroes, ellas son también nuestras heroínas.