Javi Gracia no sabe de fichajes... porque no ha querido saber

Valencia

Durante los últimos dos meses, hemos advertido lo que estaba ocurriendo en diferentes ocasiones. Javi Gracia no participaba en las reuniones para planificar el mercado de enero. Cada una de esas ediciones de SER Deportivos València levantaba un considerable revuelo en el club, programas transcritos incluidos. Pero nadie salió a desmentir nada. Más bien, todo lo contrario. Fue el propio entrenador quien señaló en diferentes ocasiones que, efectivamente, se mantenía al margen de la toma de decisiones en el mercado de fichajes. 

A nadie debería sorprenderle, por tanto, que las incorporaciones de Ferro, Oliva y Cutrone se hayan producido sin consenso con el técnico. No hay más que escuchar a Javi Gracia, por ejemplo, el pasado 18 de diciembre: "No sé los jugadores que pueden venir o pueden salir. Esa no es mi responsabilidad. No he tenido ninguna reunión ni, sinceramente, creo que la vaya a tener". Un par de semanas después, la línea argumental del entrenador navarro era la misma: "Todo lo que se refiere a fichajes o incorporaciones no tiene sentido para mí. No sé qué jugadores van a venir, ni si van a venir, ya os lo he dicho muchas veces. Las decisiones que se tengan con tomar con respecto a la plantilla tendréis que preguntárselas a otros". 

Por eso resultó especialmente chocante que, entre líneas, Gracia se quejara el sábado tras la victoria contra el Elche por no haber sido informado. "No se me ha comunicado absolutamente nada", dijo. ¿Qué había que comunicar? Si el entrenador llevaba insistiendo tiempo en que no quería saber nada sobre el asunto... Nadie le quita la razón al míster con respecto al engaño que sufrió en verano. Está denunciado por activa y por pasiva. Pero ha radicalizado tanto su postura que ha terminado por equivocarse. De entrada, haciendo el ridículo en sala de prensa. Mientras decía convencido que no esperaba salidas, Rubén Sobrino hacía la maleta para firmar en Cádiz. Mientras insistía con su discurso de poner en duda la capacidad de la SAD para hacer fichajes, Valencia y Wolverhampton intercambiaban documentos para la cesión de Cutrone. 

Y eso no es lo peor. Lo peor es que es precisamente Javi Gracia el que ahora tiene la potestad de decidir si pone o no pone a los tres jugadores que le han traído. Y, le guste o no, lo que le han traído mejora lo que tenía. Ferro siempre será mejor que Mangala. Cutrone siempre será mejor que Sobrino. Incluso puede hacerle sentir algo de competencia a Maxi, al que el entrenador (aunque luego lo negara) tuvo que sentar en Granada por bajo rendimiento. Oliva siempre será mejor que nada. Habrá que esperar al 30 de junio para enjuiciar si es mejor o peor que Capoue. Si es que juega, claro...