La incidencia a siete días baja de 500 casos y confirma el descenso
Los datos corresponden con los que había a mediados de enero, cuando se aprobaron las restricciones para la hostelería y los centros comerciales

Realización de un cribado masivo / ICAL

Valladolid
La curva de incidencia refleja ya una clara tendencia de descenso en la provincia de Valladolid. Es mucho más pronunciada en el dato a siete días, pero el acumulado de dos semanas también constata el menor número de contagios. De igual manera, el número reproductivo básico, que mide a cuántas personas puede contagiar un infectado, sigue a la baja y por debajo de 1, la barrera a partir de la cual se considera que no hay control en la expansión del virus.
Por primera vez desde mediados de enero, la incidencia a siete días se sitúa por debajo de los 500 casos, en concreto, 447 El dato más parecido es del día 12, cuando había 413. Un día antes, y debido al rápido incremento que se registraba tras las celebraciones navideñas, la Junta volvió a aplicar el cierre interior de la hostelería y de las grandes superficies comerciales así como de las instalaciones deportivas cubiertas. Además, el 14 de enero entró en vigor el adelanto del toque de queda a las ocho de la tarde.
Lo que se mantiene estable es la presión en las unidades de críticos que tienen casi siete de cada diez camas ocupadas por pacientes COVID. La atención a estos pacientes y a los relacionados con otras patologías mantiene a estas zonas en el máximo de su capacidad en los hospitales de la provincia.

Mario Alejandre
Valladolid, 1977. Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Pontificia de Salamanca....




