El TSJC mantiene que la violación en grupo de Manresa fue abuso y no agresión sexual

Barcelona

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) mantiene que la violación múltiple de la Mandada de Manresa a la menor de 14 años fue abuso y no violación. El tribunal tumba parcialmente el recurso de la fiscalía y la víctima. Lo hace, sin embargo, con un voto particular de uno de los tres jueces del tribunal que cree que sí que fue una violación grupal con intimidación.

Los hechos se remiten al 29 de octubre de 2016, en un botellón en una fábrica abandonada de Manresa. La víctima tenía 14 años, bebió, fumó porros y quedó inconsciente. Entonces, un grupo de 5 hombres la arrastraron hasta una caseta y la violaron por turnos de 15 minutos durante horas. La Audiencia de Barcelona dijo que era abuso y no violación porque la menor no podía reaccionar, "y, consecuentemente, sin poder determinarse y aceptar o oponerse a las relaciones sexuales que con ella mantuvieron la mayor parte de los procesados, los cuales pudieron realizar los actos sexuales sin utilizar ningún tipo de violencia o intimidación". El Tribunal Superior de Justicia le da la razón.

El TSJC recuerda que para valorar los recursos y decidir si agrava la sentencia solo puede basarse solo en los hechos probados que recogió la Audiencia: que la joven quedó inconsciente y que no hubo intimidación. Por eso, mantienen el criterio de la sentencia. "La única circunstancia que determinó la voluntad de la víctima fue el estado en que se encontraba como consecuencia del consumo de sustancias tóxicas, más allá, obviamente, de su edad, que convierte un eventual consentimiento en irrelevante", concluyen dos de las juezas que desestiman los recursos.

Aun así, están de acuerdo que la violación que sufrió la menor fue "un ataque especialmente intenso y denigrante" y por ello consideran que la indemnización de 12.000 euros que se fijó es demasiada baja y la elevan a 60.000 euros como solicitaba la fiscalía. La sentencia tiene un voto particular de un juez que cree que había intimidación ambiental porque los acusados violaron múltiples veces y en grupo a la menor, que solo tenía 14 años. El magistrado cita la sentencia del Supremo sobre la Manada de Pamplona para describir la "intimidación ambiental". Entiende que el hecho que cinco hombres mucho mayores que ella la violaran por turnos "anuló su voluntad de resistirse" y considera que deberían ser condenados por agresión sexual.

Dos de los cinco acusados permanecen fugados en paradero desconocido. La Audiencia emitió una orden de búsqueda después de que no se presentaran cuando fueron citados para entregarles la sentencia. Los otros tres abusadores siguen en libertad provisional hasta que la sentencia sea firme.