La Justicia asturiana ratifica 24 años de cárcel para Javier Ledo por el asesinato de Paz Fernández

Asturias

La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) ha confirmado íntegramente la sentencia de la Audiencia Provincial que condenó a 24 años de cárcel a Javier Ledo por el asesinato de María Paz Fernández Borrego, al mantener las agravantes de alevosía y desprecio de género.

El alto tribunal asturiano, que ha desestimado todos los argumentos esgrimidos en el recurso de apelación interpuesto por la defensa de Ledo, sostiene que Ledo actuó con alevosía al cometer una agresión "repentina, contundente y concurrente con una situación de debilidad de la víctima" a causa de su estado de embriaguez el día de los hechos, el 13 de febrero de 2018.

Ledo, según el tribunal, actuó repentina y sorpresivamente aprovechando que la víctima estaba distraída enviando un whatsapp y le propinó de "forma sucesiva y repetida" varios golpes con fuerza. El TSJA advierte de que el móvil del asesinato fueron los celos que Ledo sintió al ver que conversaba con su antigua pareja, lo que le empujó a "golpearla fatalmente". La Sala de lo Civil y Penal también ha ratificado que Ledo cometió el asesinato por razón de género ya que considera probado que actuó movido por los celos con un sentido de la posesión respecto a María Paz.

La Audiencia declaró probado que en febrero de 2018, Ledo con la intención de acabar con la vida de María Paz, mientras escribía un mensaje a su expareja "sin previo aviso, de forma sorpresiva y de manera imprevista y repentina", cogió un rodillo de cocina envuelto en una bolsa u otro objeto contundente así como varias piedras y le propinó "de forma sucesiva, repetida y desmesurada" varios golpes. El ataque fue dirigido hacia los brazos, cara, cabeza y el hombro izquierdo que le provocó un traumatismo craneoencefálico severo que le produjo la muerte.

Posteriormente Ledo se deshizo del cadáver y lo trasladó por la carretera AS-25 de Navia a Villayón, donde lo arrojó desde el puente al arroyo de La Pontiga junto al embalse de Arbón. Al regresar a su domicilio, trató de eliminar todos los restos de sangre utilizando cemento en polvo y productos de limpieza.

La sentencia del TSJA, contra la que cabe recurso de casación ante el Tribunal Supremo, mantiene la pena de alejamiento de 25 años respecto a los familiares de la víctima, a los que tendrá que indemnizar con 231.000 euros.