No es Asturias, es Córdoba

Córdoba

Esta semana hemos propuesto a nuestros aventureros que nos recomienden rutas que podamos hacer sin incumplir las restricciones del Covid: es decir, sin abandonar el término municipal de Córdoba.

Todo un reto para dos personas que, como reconoce José Juan Luque, “en cuanto tenemos dos o tres días libres siempre pensamos en irnos fuera, no en quedarnos en Córdoba”. De hecho, como ha reconocido Aristóteles Moreno, "después de 25 años de montaña, ahora estoy descubriendo Córdoba, porque, me da vergüenza decirlo, pero es el sito por el que menos he caminado”.

A pie por el Barranco de Huesa

Con la premisa de no ser sancionados por la Guardia Civil en caso de ser interrogados, Aristóteles Moreno nos propone una ruta que comienza en el Puente de los Boquerones, en la carretera que une Trassierra con Villaviciosa, y que nos llevará hasta el Barranco de la Huesa.

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Por delante 20 kilómetros “de cerros, vaguadas y pequeños valles, con tramos campo a través, y un desnivel de 700 metros”, solo recomendable para montañeros experimentados. Así hasta llegar el Barranco de la Huesa, “declarado sitio de la memoria histórica”, donde, como nos ha contado Aristóteles, el alcalde de Villaviciosa se escondió junto a un grupo de guerrilleros hasta que la Guardia Civil lo mató en 1947. “Cuando conoces el terreno llegas a entender cómo puede alguien emboscarse durante 8 años”. Y te imaginas, añade Moreno, “cómo tuvieron que ser los inviernos ahí, en cuevas o a la intemperie”.

Por el canal del Guadalmellato

Por su parte, José Juan Luque nos propone una ruta “para toda la familia” siguiendo el curso del Canal del Guadalmellato, desde San Rafael de la Albaida hasta el límite con Almodóvar. “Una ruta ideal para familias que quieran iniciarse en el uso de la bicicleta”. Nos dice. Y a la que no le faltan atractivos: “Iremos en paralelo a la Sierra, junto al canal, lo que nos ofrece un paisaje verde, con mucho ganado, muy bonito”. “No hay excusa para no hacerla”, asegura. Aunque es recomendable evitar los días de lluvia si no queremos acabar enterrados en barro como le ocurrió a José Juan en su primer paso por esta ruta, rumbo a Portugal.

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En ambos casos, José Juan y Aristóteles reconocen que tras las últimas lluvias el campo, sea sierra o campiña, "está verde y precioso para salir y disfrutarlo", a pie o en bicicleta.