Las torres de València que acabaron en fiasco

Valencia

La relación de València con las construcciones en altura es la historia de cuantiosos fiascos. Recuerdo la torre de telecomunicaciones de Calatrava, diseñada para ser un hito arquitectónico en la Ciudad de las Ciencias, pero que acabó desterrada. O la torre de la música, presentada con una gran pompa, que iba a albergar la sede de la Berkleee y que al final quedó en agua de borrajas. Y qué decir de las tres torres de Calatrava, esos rascacielos casi en la desembocadura que nunca tuvieron visos de ser una realidad.

La única torre construida en estos años se levanta en medio de una rotonda en la avenida de Catalunya se diseñó como mirador, pero no se puede utilizar porque el ascensor está averiado y nadie quiere arreglarlo. En fin, le deseo mejor suerte a la torre eólica aunque a tenor de las experiencias que ha tenido la ciudad, yo me prepararía para lo peor.