De tú a tú: Casa Rural 1904 y Casa Rural Puerto Sanz

RIBERA DEL DUERO

La hostelería y el hospedaje son uno de los sectores más perjudicados por el covid-19. Las restricciones parecen haberse ensañado con estos establecimientos, que simplemente tratan de sobrevivir en su día a día, a pesar de los cierres, y de las grandes inversiones que tienen que llevar a cabo cuando abren sus puertas. Como cada tarde, en nuestro nuevo espacio que cuenta con el apoyo de la DO Ribera del Duero, la Ruta del Vino y ASOHAR, compartimos las impresiones de dos gerentes de este sector, para repasar sus impresiones y situación. En esta ocasión lo hacemos dentro del mundo de las casas rurales, con Pilar Manso de la Casa Rural 1904 de Tubilla del Lago, y Xenia Tomás, de Puerto Sanz de Zazuar.

"Aquí o funcionas tú o la cosa no funciona. Estamos un poco abandonados, a nosotros no nos han cerrado pero han limitado el número de plazas y si cierran perimetralmente Burgos solo dejan que venga gente de aquí, y la mayoría en general solía venir de Madrid o País Vasco. Normalmente hablan de la hostelería pero también estamos toda la gente del turismo rural, que damos vida, y nos tienen absolutamente abandonados. Podemos estar muy bien anunciados y hacer publicidad, y la gente sabemos que quiere salir porque alguna reserva llega, pero es que no dejan salir a la gente. Y siendo así, ¿qué hacemos? Ni siquiera tienen en cuenta el porcentaje de gente ni están estudiando nuestra situación", explican. 

Ambas se han visto afectadas por los cierres perimetrales y la pérdida de ingresos que ha originado tanto esa como otras restricciones. "Nos han fastidiado toda la primavera que es bestial, el otoño en la Ribera del Duero que es magnífica, y el mes de diciembre que es muy bueno. Solo hemos tenido julio y agosto, y ha habido reservas porque la gente tenía ganas de salir, pero también nos confinaron Aranda y se cayó todo. Es un cúmulo de despropósitos, y es que te da miedo de poder abrir porque ya con gastos igual ni te sale rentable, pero es que ya no sabes ni lo que vendrá", cuentan.

Por último, tanto Pilar Manso como Xenia Tomás se han encontrado un problema a mayores. "Yo pago autónomos, tuve un cese de actividad y cuando se levantó el estado de alarma seguía pagando. Y ahora tengo cerrada la actividad pero no porque te la cierren sino porque me ahogan tanto que no puedo abrir, y resulta que ahora estoy trabajando media jornada, y solo por eso y tener algo de ingreso no me dan el cese de actividad. Mires por donde lo mires te preguntas, ¿qué haces?", dice Xenia.  "A mí me pasa lo mismo, soy autónoma pero tengo otra historia. Y no te tienen en cuenta por facturar en otro sitio, y en definitiva no tienen en cuenta el turismo rural", sentencia Pilar.

La charla al completo con ambas gerentes de casas rurales puede reproducirse en el siguiente audio.