Arranca en Sevilla el juicio por el despido de los trabajadores de LTK

Cádiz

La sala 2 de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) empieza a decidir hoy si Alestis debe subrogar a los 50 trabajadores que fueron despedidos de una de sus contratas, LTK, tras el cierre de la planta que tenía en la Zona Franca de Cádiz.

Fue el pasado noviembre cuando Alestis decidió romper el contrato suscrito con LTK para que este último le suministrase material aeronáutico. Tras la finalización, "de manera unilateral" según fuentes de LTK, la empresa tuvo que presentar un despido colectivo que afectó a medio centenar de empleados que se vieron en la calle.

Varios trabajadores interpusieron una demanda contra LTK y contra Alestis. Finalmente, la demanda que se ha tenido en consideración es la que presentó el SAT, con mayoría en el comité de empresa, y que representa los intereses de 13 trabajadores. Seguidamente se han ido uniendo otras acusaciones, como la de CC.OO., que a través del abogado Luis Ocaña, representará a otros 29 trabajadores. También el sindicato UGT, con voto en el comité, se ha personado como acusación.

Los empleados reclaman la nulidad de ese despido y que sean subrogados por Alestis, y depositan su confianza en que el pasado mes de julio, en un caso similar, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ya declaró nulo el despido de 34 empleados de LTK que trabajaban en la factoría de San Pablo (Sevilla) y condenó a la compañía aeronáutica a readmitirlos "inmediatamente" y a pagarles los salarios que dejaron de percibir.

Además, según ha argumentado Ana Malines, representante de Comisiones Obreras en el comité y una de las trabajadoras despedidas, cuando Alestis retome la actividad y la carga de trabajo habitual se verán cortos de personal y tendrán que llevar a cabo contrataciones. Esta es otra de las razones por las que los empleados estiman oportuno que se obligue a la empresa a subrogarles.

Postura de la empresa