Los talleres y los concesionarios, diezmados por la pandemia

Zaragoza

"Corre que me marcho", decían los clientes el día en el que Zaragoza se desconfinó. Es un pequeño repunte de trabajo para los talleres que, sin embargo, no logra paliar sus pérdidas. Como tampoco las de los concesionarios, que miran a 2022 como el de la recuperación económica. La pandemia deja unas negras cifras al sector con una caída de casi el 14% en la facturación y con una perdida de empleo considerable: han sido 3301 personas frente a las 79 del 2020. El reto, conseguir un millon doscientas mil matriculaciones, la misma cifra que se alcanzó en 2019. Raul Morales, director de comunicación de Faconauto reconoce que "estuvimos cerrados dos meses y no pudimos remontar ese tiempo con falta de matriculaciones. Cuando volvimos a reabrir, el mercado funcionó muy bien en mayo y nos ayudó también el plan renove. En otoño volvimos a caer y por eso alcanzó un 14% de impacto". Y particularmente la pérdida se ha producido en puestos de trabajo. "El concesionario es un empleador muy activo, que forman muy bien a la plantilla, muy profesionalizado, pero ante la caida, ha habido concesionarios que han tenido que ajustar la plantillas para sobrevivir y otros se han visto abocados al cierre", añade Morales. 

Ahora el objetivo es ver cómo se comporta este primer trimestre que consideran clave. "Tenemos que confirmar si vamos hacia la pérdida de facturación o si mantenemos el tipo este año. Todo dependerá de la evolución de la pandemia, de la vacunación y de si somos capaces de reavivar la demanda", concluye el responsable de comunicación, que sentencia: "Prevemos que en 2021 no se va a producir esa recuperación, acabaremos con un millon de coches matriculados, que está lejos del 1,2 millones del año 2019, al que aspiramos ya para el próximo año".

Los talleres, muy irregulares

Son un servicio esencial, pero han visto caer su volúmen de trabajo con la pandemia y las retricciones de movilidad, en algunos momentos hasta el 95%. Unos 400 en la provincia de Zaragoza están bajo el paraguas de la Asociación ATARVEZ. Con la capital desconfinada desde el viernes, sus teléfonos no han parado de sonar. El portavoz de ATARVEZ, José Antonio Mora, constata:"Hay muchas ganas de salir. Cuando la consejera salió hace unos dias a decir que esperaba abrir pronto, ese día recibimos un aluvión de llamadas". Con los coches parados durante semana, aparecen los problemas, "principalmente coches que no arrancaban o neumáticos pinchados de gente que a lo mejor lo ha tenido parados dos meses" son los arreglos más habituales estos días. El fin del confinamiento de la capital y la posibilidad de moverse por la provincia les ha servido de alivio para su complicada situación. "Podemos estar abiertos, con muchas restricciones en la movilidad, pero vivimos del trasiego, de mantener los vehiculos en condiciones. Cuando se paró la primera vez la actividad cayó un 95%". Ahora se ha recuperdo, pero sigue en cifras muy bajas, lo que, inevitablemente ha desembocado en algunos casos en ERTEs y en otros en despidos.