Llega al Talía "Heredarás la lluvia" de Imprebís
Una distopía llena de ácida ironía, muy en la línea de IMPREBÍS, en la que Carles Castillo y Carles Montoliu cuentan con la música en directo de Víctor Lucas y la dirección de Santiago Sánchez
Entrevista a Carles Castillo
08:13
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Valencia
Desde este viernes y hasta el 14 de marzo, nueva oportunidad para disfrutar de Imprebís en el Teatre Talía, después de haber pasado por el Principal de València. En Hoy por Hoy Locos por Valencia, Carles Castillo nos describe “Heredarás la lluvia”, que interpreta junto a Carles Montoliu con la música en directo de Víctor Lucas y la dirección de Santiago Sánchez.
En 2015 Imprebís explora las posibilidades de una escritura automática a partir de la improvisación como herramienta de creación y, a través del trabajo colectivo sobre escena, que se plasmó en su montaje ‘La Crazy Class’, surgió una nueva propuesta de dramaturgia contemporánea. Ahora unen todas esas líneas de acción habituales en su trabajo –actualidad, absurdo, música en vivo y palabra creada a partir de la improvisación– en su nuevo espectáculo: ‘Heredarás la lluvia’.
Carles Montoliu y Carles Castillo representando 'Heredarás la lluvia' en el Teatre Talía / Imprebís
‘Heredarás la lluvia’ es una búsqueda de anhelo a través del humor, tierno, poético, a veces satírico o cruel. En la espera, en la inmovilidad, los personajes reflexionan sobre la sociedad, los valores, la ciencia, y cultivan la paciencia. En esa espera encuentran su esperanza. Con una dramaturgia que otorga sentido al texto y actúa a modo de copa de árbol, vivo, flexible, ellos, los actores, van relatando pensamientos íntimos y sus miradas sobre el mundo para recuperar sensaciones. La música y la palabra están cohesionados, comparten el ritmo, las pausas y el silencio. Los personajes escuchan al músico y el músico escucha a los personajes. Jugar, jugar con el gesto, las palabras, el espacio, los sonidos para preservar la lucidez de espíritu, la libertad.
La corriente del absurdo parte de la búsqueda del sentido de la vida y de la propia existencia. Es un estado de reflexión que utiliza el humor a través de la ternura y de la poesía. Pone en cuestión la lógica cotidiana jugando con el lenguaje y haciendo uso de la repetición.
Usando formas de expresión como la parodia, la exageración, la sátira o la ironía, provoca un estado de extrañeza ante hechos que hemos aceptado como “normales”.
