El alcalde se siente "desorientado" por los cambios de criterio de la Junta ante la Covid

Burgos

El alcalde de Burgos, Daniel de la Rosa, ha asegurado hoy que se siente “desorientado” y llega a “desconfiar” ante los cambios de criterio de la Junta de Castilla y León en cuanto a las medidas para frenar la Covid-19. En una entrevista en Hoy por hoy Burgos, De la Rosa ha recordado que cuando Burgos lideraba en noviembre los malos datos en la comunidad entendió que se adoptaran medidas más restrictivas, aunque ahora que se encuentra en la situación contraria, no se da “ningún respiro” a los sectores más perjudicados.

De hecho, asegura que esperaba que ayer se anunciara desde la Junta de Castilla y León la apertura de gimnasios y, sobre todo, del interior de la hostelería, al menos con un 33% de aforo porque “es más fácil controlar el aforo en los interiores que el de las terrazas, tanto para los propietarios como para la Policía Local.

El alcalde de Burgos ha aprovechado este martes la reunión del comité de seguridad, junto a Subdelegación del Gobierno y Delegación de la Junta, para pedir que se organicen operativos conjuntos de Policías Local y Nacional en zonas donde hay problemas de botellón, porque se suelen producir situaciones que exceden las atribuciones de la Policía Local. 

Ha puesto el ejemplo de la zona de Venerables, en pleno centro de Burgos, donde se han registrado 17 intervenciones desde mediados de enero de la Policía Local y solo una presencia “testimonial” de la Policía Nacional.

En esa zona se han producido agresiones, peleas, daños en el mobiliario y se han incautado navajas, según precisa el alcalde, que atribuye parte de estas situaciones al cierre de establecimientos de hostelería que provoca que haya más personas en la calle buscando alternativas, entre ellas el botellón.

De la Rosa reconoce que el problema del botellón ya se producía antes de la pandemia y, cuando se actúa para frenarlo en algún lugar, simplemente se traslada a otros puntos de la ciudad. Insiste en que la solución puede estar en ofrecer alternativas a los jóvenes, como se hará en Burgos con el I Plan de Ocio Alternativo y Saludable en el que trabaja el Ayuntamiento de Burgos y que se pretende aprobar este mismo año.

“No se trata de obligar a los jóvenes a ciertas actividades, porque sería seguramente contraproducente, sino de ofrecerles alternativas atractivas, capaces de atraerles”, ha explicado De la Rosa.