La historia de Nieves

Las Palmas de Gran Canaria

Hoy es 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. Les daría las felicidades a todas nuestras oyentes pero desgraciadamente no hay mucho que celebrar. Y más en un año en el que ser mujer ha sido más complicado que nunca.

Hace justo un año les contamos aquí, en la SER, la historia de Nieves. Una grancanaria cuya vida refleja a la perfección lo que significa ser mujer en una pandemia. Nieves se dedicaba a limpiar casas, lo hacía sin contrato como muchas compañeras. Un trabajo precario con el que apenas tenía derechos, por lo que cuando el virus nos encerró en casa ella se quedó sin ingresos. Ella y su hijo Nahuel, un joven de 22 años con autismo y parálisis cerebral. Un gran dependiente al que Nieves le dedica, desde hace un año, casi todo su tiempo.

La pandemia ha conseguido que Nieves y su familia convivan ahora con la miseria. Han tenido que acostumbrase a desayunar con infusión porque no tienen ni para leche o cereales, no tienen dinero para que Nahuel reciba algún tipo de terapia mientras está en casa, viven gracias a la ayuda que reciben de familiares mientras esperan por las que les prometieron las administraciones.

El rostro de Nieves es el rostro de muchas. De mujeres que en el último año han perdido su trabajo, que han tenido que ocuparse de un familiar, que se hacen cargo ellas solas de su familias, que apenas reciben ayudas públicas, que han empeorado su salud física y mental, que demuestran que hemos creado una sociedad donde el hombre, simplemente por ser hombre, tenemos más ventajas que ellas. Por esas mujeres, en este 8M no hay nada que celebrar pero sin duda hay mucho, muchisímo, que reivindicar.