Miku: "El míster nos pidió que dejemos de hacer cuentas"
El venezolano celebra su buen partido ante el Pontevedra y cree que una segunda victoria consecutiva lanzaría al equipo
A Coruña
La victoria del pasado domingo ante el Pontevedra tuvo varias lecturas. Al margen de escaparse del rival en la tabla, el partido dejó a varios protagonistas positivos. Uno de ellos fue el venezolano Miku. El ariete, que aunque no marcó, cuajó su mejor partido desde su llegada a Riazor. Reconoce su mejoría, sobre todo en el aspecto físico y espera que este sea, por fin, el inicio del regreso de su mejor versión.
Tras el partido y sus buenas sensaciones, Miku quiere dar así carpetazo a un año plagado de problemas físicos que intentó explicar en rueda de prensa: "Estoy muy triste porque a lo largo de mi carrera estoy acostumbrado a 70 partidos sin lesiones. La causa es que la liga donde estaba jugando el año pasado se suspendió y venía de 6 meses sin hacer nada de fútbol. El grupo cuando vine tenía mucha ventaja en el aspecto físico. Luego me lesioné y por mi culpa, por querer volver antes de tiempo, casi me rompo. Ojalá todo esté bien y pueda ayudar.
Ganar, ganar y volver a ganar
Centrados ya en el duelo del domingo y en la situación clasificatoria, el vestuario mantiene durante toda la semana un mensaje de clara prudencia. "Yo siempre he sido una persona muy ambiciosa. No estamos incurriendo en el problema del principio del año. Ahora estamos con el tópico del asunto del partido a partido. Sacar los 3 puntos", confiesa el delantero. Para Miku, la calculadora debe quedar apartada en todo momento del grupo. Asegura que el entrenador "nos pidió que dejemos de hacer cuentas", y por lo tanto, ganar es el único objetivo sin mirar a la tabla.
"Todos los partidos tienen su dificultad. Cada fin de semana es una guerra", reconoce el veterano jugador, quien además valora lo bueno que sentaría al grupo lograr volver a sumar de tres. "Encadenar dos victorias seguidas nos va a venir muy bien para que el equipo se siga liberando. Tenemos un potencial tremendo pero no hemos sido capaces en todo el año de sacarlo a flote". No vence a domicilio el Deportivo desde el pasado mes de noviembre, cuando se impuso por la mínima a Unionistas en Salamanca.
Un Celta B peligroso
"El Celta B es un filial con un entrenador que no hay que descubrirlo. Me espero un partido complicado en un campo de dimensiones más pequeño que Balaídos. Pero eso no debe ser un problema para nosotros. Todos hemos jugado en este tipo de campos. Pasar por esos campos nos ha hecho ser jugadores profesionales. Será un partido aguerrido ante une grupo que está por encima de nosotros. Pero tenemos que ponernos el mono de trabajo. Y esperemos que se decante la balanza a nuestro lado", reflexiona el jugador.