Andarines y ciclistas suben al Monte 'El Viejo' para ver los efectos del saneamiento del paraje

Palencia

Guardando estrictamente las medidas de seguridad anti Covid-19, en grupos debidamente separados, decenas de ciclistas y andarines han subido esta mañana al Monte 'El Viejo' de Palencia para ser testigos de los polémicos trabajos de saneamiento que está acometiendo la Junta de Castilla y León en el paraje conocido como el pulmón de Palencia. Mientras que la administración habla de trabajos absolutamente imprescindibles para prevenir incendios con limpieza de vegetación y creación de cortafuegos, son muchas las voces, particulares y de colectivos, que hablan de devastación. Creen que a la administración se le está yendo la mano.

Esta mañana se veía incluso a familias que han dedicado la mañana del domingo a ser testigos de unos efectos que están generando un auténtico debate en la calle y en los medios de comunicación. El promotor de esta iniciativa ciudadana ha sido José Luis Ainsúa, conocido ciudadano por otras iniciativas que han tenido una importante repercusión mediática. El propio Ainsúa nos contaba las impresiones que ha ido recogiendo de caminantes y ciclistas.

"Han sido decenas de personas las que, durante la mañana han hecho el recorrido desde el Valle de San Juan hasta la Casa Grande", señalaba el promotor de la iniciativa a Radio Palencia de la Cadena SER. Añadía que "han mostrado su indignación por lo que están haciendo con nuestro Monte. Algunos de ellos se preocupan por el tipo de negocio que se está haciendo con la madera, a costa del Monte de Palencia". También subraya que "preocupa cómo pasa el ayuntamiento de este tema cuando tenía que estar velando por una tala normal y en cambio se anteponen los intereses de una empresa que venderá los restos de la poda y tala".

Según Ainsúa, algunos han mostrado su preocupación por los efectos perniciosos que puede tener la actuación por los incendios que se puedan cebar en la hierba y maleza que crezcan en las zonas más afectadas por las actuaciones. Por último, destacaba el testimonio de un ciclista de un grupo de seis que le indicaba que "es una pena que por donde ellos circulan, que antes era una zona de sombra, ahora va a ser un área de intenso sol y calor por la que no se va a poder circular con la bici".