Jean-Serge Nérin, el último asesinado por ETA

Bilbao

16 de marzo de 2010. Ese día ETA asesinó por última vez. Y lo hizo en Francia, cerca de París. En un control rutinario, el brigadier-jefe Jean-Serge Nérin fue tiroteado por unos etarras que acababan de asaltar un concesionario de coches. En 'La Ventana de la Memoria' hablamos con su hijo, Floryan

¿Qué edad tenía cuando ETA mató a su padre?

Cuando ETA mató a mi padre yo tenía 18 años.

¿Recordará entonces muy bien aquel día, no?

Sí, me acuerdo muy bien de aquel día. Me acuerdo bien porque cuando me despedí yo me iba al colegio y él al trabajo. Era el 16 de marzo y aquel día había fútbol de la Liga de Campeones. Tenía la costumbre, cuando trabajaba, de venir a ver la segunda parte del partido conmigo. Le dije que no llegara muy tarde, que no se entretuviera para que viéramos la segunda parte del partido ese día. Llegué hacia las 20h00 y me llamó mi tía para contarme que algo había pasado en la zona de trabajo de mi padre, que un policía había sido abatido. Al principio había informaciones erróneas sobre la edad del agente y pensamos que no era mi padre. Tratamos de contactar con la comisaría para que nos dieran más información sobre el caso pero no quisieron decirnos nada. Finalmente fue un compañero de mi padre quien nos contó lo que había sucedido. Eran en torno a las 21h00.

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Supongo que fue muy duro

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Sí, fue muy duro porque la noticia nos cayó de golpe. Yo esperaba a que mi padre llegara por la tarde-noche para ver tranquilamente el fútbol con él… y fue muy duro. Nos costó mucho recuperarnos. Vivir sin él todos los días, retomar nuestras vidas, sacar adelante nuestros proyectos… fue muy duro. Pero supimos mantenernos unidos. A mi padre no le habría gustado que nos quedáramos tristes. El habría querido que realizáramos nuestros proyectos y nos mantuviéramos unidos apoyándonos en familia.

Antes del atentado, usted sabía qué era ETA? Se había imaginado alguna vez que su padre podría ser víctima de ETA?

En Francia se habla menos de ETA que en España. Pero sí sabía lo que era, que cometía atentados sobre todo en España. Se habían producido algunos problemas en el País Vasco francés… sabíamos que era un grupo terrorista pero poco más. No tenía mucha información Pero, evidentemente no. Nunca pensamos que algo así nos podía suceder, ni por parte de ETA ni de cualquier otro grupo terrorista. Pero el riesgo de atentado existe… no sólo de ETA sino de cualquier otro grupo terrorista. Y no hay que confiarse.Mi padre era policía, tenía un trabajo peligroso y ya había sido herido de gravedad con anterioridad en el desempeño de su trabajo. Pero nunca pensamos que esto nos podía pasar. Y sí, nos pasó.

Floryan, ¿cómo era su padre?

Mi padre era alguien que pensaba ante todo en los demás antes que en sí mismo. Era alguien que siempre estaba dispuesto a ayudar, siempre dispuesto a dar a los demás. Y es por eso que eligió esta profesión.

Dudó entre ser cartero o policía. Hay gente en Francia a la que no le gusta esta profesión. Pero a mi padre sí, la veía como una forma de ayudar y de salvar personas. Ése era su objetivo principal. En sus funciones lo describían como alguien severo pero justo. Solía dirigir grupos de jóvenes policías con poca experiencia o recién salidos de la escuela. Y les decía lo que hacían mal, pero siempre estaba dispuesto a ayudarlos pasara lo que pasara.

Y era amable. Para él su familia era lo primero. Se desvivía por ella y hacía todo para que su mujer y sus hijos estuvieran contentos.

Se habla mucho de los muertos, pero quienes sufren son los que sobreviven. ¿Qué secuelas le ha dejado el atentado?

El atentado nos dejó un enorme vacío… muy difícil de superar. Yo estaba muy unido a mi padre. Nuestra pasión común era el fútbol y el deporte en general. Veíamos juntos todos los deportes en la TV. Éramos diferentes pero el deporte nos acercaba y compartíamos esa pasión.

Nos dejó un enorme vacío y hemos tenido que aprender a vivir sin él. Fue muy duro para mi madre, que decidió vivir cerca del cementerio donde está enterrado mi padre. Hoy todavía es difícil… me faltan los consejos de mi padre para saber cómo actuar en vida adulta.

Otra vez menciona el fútbol, ¿de qué equipo eran, es usted?

En Francia teníamos equipos rivales. Mi padre era del Olympique de Marseille y yo del Olympique de Lyon, que ha jugado muchas veces contra el Madrid en Champions. Pero nos gustaba el buen juego y teníamos un equipo en común: el Arsenal porque jugaba muy bien, con pases muy rápidos de balón.

Durante el juicio los acusados de asesinar a su padre pidieron a la familia que les perdonase. ¿Usted lo ha hecho? ¿Les ha perdonado?

“No, perdonar no, porque, como he dicho, evidentemente, nosotros en nuestro caso no imaginamos matar a nadie por una causa… cualquiera que sea la causa. No imaginamos algo así, matar a alguien, y menos todavía después de haber robado varios coches y haber retenido a varias personas en un concesionario de coches. No les perdonaremos nunca, eso es seguro, porque, si se invirtieran los roles, si alguien matara a alguien de su familia, ellos no le perdonarían y nosotros nunca vamos a perdonar a esas personas".

Su padre fue la última víctima de ETA. La banda dejó de matar al año siguiente, hace diez años. No sé en Francia, pero los jóvenes españoles comienzan a olvidar todo este sangriento pasado. ¿Qué les diría usted a esos jóvenes?

En Francia, ETA no está en boca de la gente. Se habla más del terrorismo islamista. No estoy muy al corriente de ese “olvido” en España. Pero lo que puedo decir a los jóvenes o a quienes olvidan… es que no hay que olvidar el pasado sangriento de ETA que ha vivido España. Siempre hay que pensar en el peligro que supone el terrorismo.

Después de los ocurrido en los años 50-60 durante la dictadura de Franco… el peligro siempre está ahí, cerca. Y nunca hay que olvidar a las víctimas.

Hay un reportaje que he empezado a ver en Amazon Prime que creo que podrá ayudarme a entender la evolución de ETA.

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'ETA, entre España y Francia'

El último atentado de ETA se produjo en suelo francés, pero fue la excepción. La banda terrorista siempre se cuidó mucho de no atentar en suelo galo, el país que, durante décadas, le sirvió de refugio. "ETA siempre tuvo muy claro que las actuaciones terroristas las iba a llevar a cabo en España y que no podía abrir otro frente, el frente francés", explica en el programa la catedrática en Relaciones internacionales de la Universidad Rey Juan Carlos, Sagrario Morán, que dedicó su tesis doctoral a la cooperación antiterrorista franco-española y posteriormente resumió en el libro 'ETA, entre España y Francia'.

Morán defiende que la cooperación policial de Francia en la lucha contra ETA "fue clave y decisiva, aunque no definitiva", en el final de la banda y prueba de ello es, a su juicio, que todos los grandes dirigentes de ETA fueron detenidos en suelo francés.

Sin embargo, al principio no fue así. En los primeros años de ETA, relata la catedrática, Francia se muestra reticente a intervenir, lo veía como un asunto interno español. "No termina de creerse que se estén refugiando allí porque no actúaban allí. No se lo cree ni le interesa creéreselo, no sea que vayan a atentar allí", argumenta. A ello se une la falta de sintonía personal entre los entonces presidentes español y galo, Suárez y Giscard D'Estaing.

La mejora en la colaboración entre países vecinos se produce a partir de la década de los 80, con la llegada de dos socialistas al poder, González y Mitterrand, "que ciontectan muy bien"; la entrada de España en la entonces Comunidad Económica Europea; y la irrupción del terrorismo de los GAL, que sí actuaban en suelo francés.

Memoria, por Luis Castells

La reflexión final de 'La ventana de la Memoria' firma el Catedrático de Historia Contemporanea, Luis Castells. En realidad, es la definición que hace "Memoria" en el nuevo glosario audiovisual de víctimas del terrorismo, del Memorial de víctimas y la Fundación Fernando Buesa.

 La Ventana de la Memoria