Critican que el Santander abra un "work café" en el centro de Vigo mientras cierra oficinas
Trabajadores y delegados de la CIG se concentran en Príncipe bajo el lema "Non ao SantandERE", donde recibieron el apoyo de la hostelería
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Imagen de la protesta. / CIG
Vigo
La federación de Banca de la Central Intersindical Galega (CIG) promovió este lunes una movilización contra el ERE del Banco Santander, coincidiendo con la inauguración en Vigo de un “work café” -el primero en Galicia y el séptimo de España- por parte de la entidad financeira. La plataforma denunció así que la dirección “abre chiringuitos” mientras “manda persoal á rúa e obriga a clientela a facer cola”. En este sentido, recuerdan que los planes del Santander contemplan el despido de 370 personas y el cierre de 79 oficinas en la comunidad autónoma.
El espacio, ubicado en el número 39 de la calle Príncipe, cuenta con 700 metros cuadrados distribuidos en dos plantas. En el bajo se sitúa la cafetería, zona de "cowork" y dos salas de reuniones abiertas, mientras que en el primer piso se ubican otra zona de "cowork" y cuatro salas de reuniones (dos con capacidad para ocho personas y otras dos para cuatro personas cada una).
Durante la protesta, que se prolongó de 11:00 a 13:00 horas, se desplegó una pancarta en la que se podía leer “Non ao SantandERE” y se gritaron consignas como “Coffee shop no Santander e a clientela sen atender”, “Máis persoal, menos work café, que no banco non sobra ninguén” o “Á clientela hai que atendela”. Según explicó la CIG, los trabajadores y delegados que participaron en la movilización recibieron el apoyo de algunos hosteleros de la zona, que “expresaron o seu malestar polo feito de que o Santander opte tamén por facerlles a competencia nun contexto de alerta sanitaria que está a causar un forte impacto sobre o sector”.
Desde CIG-Banca censuran que “chiringuitos” como el “work café” ahondan en la “falta de atención, nomeadamente á xente maior ou á xente que non dispón de medios dixitais para manexarse neste mundo tecnolóxico que se nos impón”, al tiempo que señalan que no están pensados para la clientela de toda la vida; “esa clientela que xa non lle importa á dirección da entidade, salvo para acribillala a comisións”.
