Detienen a tres personas por un ataque racista a los dueños de una frutería en València

Valencia

La Policía Local de València ha detenido este viernes por la mañana a tres personas por un ataque racista en una frutería de la ciudad. Los hechos han ocurrido en torno a las nueve de la mañana, cuando los tres detenidos, de entre 22 y 36 años, han entrado a una frutería y se han dirigido con tono agresivo y despectivo al propietario de la establecimiento.

Tras gritarle frases racistas relacionadas con su procedencia, han empezado a tirar fruta al suelo y han agredido al matrimonio que regentaba el local en el pómulo y en las piernas. La Policía Local de València ha podido localizar a los atacantes minutos después, gracias a la colaboración ciudadana, y los ha detenido como presuntos autores de los delitos de odio, lesiones y daños. Las víctimas han sido trasladadas al hospital La Fe de València con heridas de diversa consideración.

Al llegar al lugar de los hechos, la patrulla de la 5.ª Unidad de Distrito ha localizado a uno de los hombres, que ha resultado detenido, con escoriaciones y la camiseta rota negando su relación con la agresión. En las inmediaciones, la patrulla de la Policía Local de València ha localizado a otros dos jóvenes, gracias a la colaboración ciudadana, que al ser preguntados por los hechos, uno de ellos ha contestado a los agentes manifestando actitudes racistas. 

Condena del concejal de Protección Ciudadana

Aarón Cano, concejal del Ayuntamiento de València ha trasladado todo su apoyo al matrimonio agredido, "quiero que sepan que cuentan con todo el apoyo de la Policía Local de València y del Ayuntamiento de València al que represento, estamos a su servicio. Hoy nos han insultado, agredido y despreciado a todos y a todas, a los que luchamos día a día por desterrar las manifeciones de odio, xenofobia y racismo de nuestra sociedad" ha señalado el concejal Aarón Cano.

"La agresión que ha sufrido este matrimonio es nuestras calles es una evidencia del peligro real que tienen unas manifestaciones muy concretas, afortunadamente minoritarias en nuestra sociedad, y un discurso que agrede y atenta contra los derechos humanos fundamentales. No lo vamos a consentir, no les vamos a dar ni un centímetro de espacio. Estas actitudes no tienen cabida en esta sociedad" ha añadido el responsable del área de seguridad en el Cap i Casal.