Salvatierra - Ecologistas en Acción, alega contra la planta fotovoltaica del paraje El Puerto, en Villena

Villena

La Asociación ecologista Salvatierra – Ecologias en Acción anunciaba ayer las alegaciones que presenta a uno de los megaproyectos de plantas fotovoltaicas en el término de Villena. En concreto, el que se quiere ubicar en el paraje de “El Puerto”, de 140 MW y que con sus 302 hectáreas de superficie casi igualaría el propio tamaño del casco urbano de Villena, al tiempo que allanaría el camino a las tres instalaciones fotovoltaicas más que hay propuestas a su lado. Todas juntas, con un total de 1.233 hectáreas por tanto serían tres veces y media la superficie de nuestro núcleo urbano y el polígono el Rubial, que suponen 360 hectáreas más). De aprobarse, señala Salvatierra, acabarían con los valores ambientales, agrológicos y paisajísticos del valle camino a la Sierra de Salinas tal y como lo conocemos. Las medidas de compensación propuestas por los promotores del proyecto serían 10 cajas nido, 5 vivares para reptiles, una charca artificial y un programa de seguimiento de murciélagos.

El colectivo Salvatierra, en las alegaciones presentadas en la Subdelegación del Gobierno de Alicante, considera que existen razones suficientes para pedir la no aprobación de la solicitud de esta instalación. A juicio del colectivo ecologista, el estudio de impacto ambiental por ejemplo desprecia los efectos sinérgicos del proyecto, teniendo en cuenta todos los proyectos de energías renovables que se están tramitando en la comarca del Alto Vinalopó. Esta alegación establece también la posición de la asociación acerca de la necesidad de un arbitrio mejor ordenado por parte de las administraciones autonómica y estatal, por cuanto no parece que exista el marco normativo y estratégico territorial necesario para garantizar una adecuada tramitación de esas solicitudes. Por ello, no debería resolverse ninguna de estas solicitudes hasta que tal marco no sea desarrollado como se está demandando con insistencia desde los diversos frentes académicos, ambientalistas, agronómicos y económicos.

Salvatierra valora que la solicitud de la planta fotovoltaica se sustenta en una evaluación de los impactos ambientales claramente indiferente respecto al valor de la coherencia de la Red Natura 2000, de la presencia de recursos paisajísticos significativos y de las probables afecciones al águila real, águila imperial ibérica y ciertas aves esteparias. Además, parece especialmente remarcable que el proyecto no tiene los estudios hidrológicos e hidráulicos necesarios tanto para concretar la naturaleza de futuras construcciones que deban bregar con las escorrentías, como, más grave, las posibles afecciones sobre el acuífero “Sierra del Castellar” cuya situación oficial es “mala”.

Salvatierra señala por otra parte que es indicativo de la falta de atención al territorio y su comunidad, que el necesario proceso de participación pública se ha limitado a recibir únicamente las respuesta en una página web de dos personas de Villena recabadas, además, sin ningún criterio de relevancia o significatividad.

Salvatierra, se posiciona claramente a favor de las energías renovables en el necesario proceso de transición energética. Sin embargo, el estilo y las propuestas de proyectos como el de FV Salinas ponen de manifiesto la lógica de los grandes inversores y las mega-plantas: la misma lógica del extractivismo que desprecia a las comunidades locales y sus “lugares”. Renovables sí, pero no así.