"No somos esenciales, pero sí necesarios"

Logroño

En La Ventana de la Empresa hemos analizado otro sector golpeado con fuerza por esta crisis sanitarias. Las empresas de tiempo libre y ocio llevan un año "en blanco" y ahora reclaman la ayuda de las administraciones públicas para "poder trabajar" este verano, coincidiendo con la inmunización de gran parte de la población en La Rioja.

"No somos esenciales, pero sí necesarios", sostiene el presidente de la Asociación Riojana de Empresas Socioculturales, Tiempo Libre y Ocio (ARESSTO), Saúl Petite, en su conversación con la Cadena SER de La Rioja, junto al vicepresidente de la nueva junta directiva de la organización, Sergio Formoso.

Un sector muy amplio y heterogéneo, en el que se incluyen empresas y autónomos dedicados a la organización de actividades infantiles o campamentos de verano hasta músicos, pasando por monitores, orquestas y así hasta más de una treintena de gremios. "No nos identifican como sector", reconocen, al tiempo que confían en que el Gobierno de La Rioja les incluye más pronto que tarde en el plan de medidas según indicadores para "poder trabajar este verano", coincidiendo con la época del año en la que se acumulan sus ingresos.

Una circunstancia para la que también precisan el apoyo de los ayuntamientos ("tienen voluntad y dinero para contratar actividades, pero tienen miedo") y también del público. "Se ha demostrado que se pueden hacer actividades seguras", reiteran. Ellos se encargan de todo, desde la instalación de equipos y mobiliarios hasta el cumplimiento de las medidas. "La gente se merece disfrutar de la cultura popular, que es a lo que nos dedicamos". Y, por ello, también piden que se les tenga en cuenta en las programaciones culturales con compañías riojanas. El denominado kilómetro cero de la cultura que precisa también de unas empresas de ocio y tiempo libre que "contribuyen sin duda a la cadena de valor y la creación de empleo".