El empate ante el Betis le puede salir caro al Valencia por las lesiones
Correia, Carlos Soler y Racic tuvieron que retirarse por sendas lesiones que, pese a parecer de diversa gravedad, merma al equipo de Gracia de cara al partido del miércoles en Pamplona; la buena noticia: el regreso de Piccini más de año y medio después
Valencia
El empate cosechado en el Benito Villamarín deja en lo positivo la imagen del equipo en la segunda parte que sirve para poner fin a una sangría de derrotas lejos de Mestalla que enlazaba las visitas a Real Madrid, Getafe, Levante y Cádiz. Eso sí, el equipo de Gracia sigue sin ganar un partido liguero fuera desde que lo hiciera el 10 de enero en Valladolid.
Pero este empate ante el Real Betis también deja secuelas que vamos a ver la gravedad que alcanzan. Son en forma de lesión. Porque hasta tres jugadores distintos tuvieron que abandonar antes de tiempo el césped del Villamarín.
El primero en hacerlo, a los ocho de minutos de partido, fue Correia, que es el que más preocupa. Al portugués se le quedó clavada la rodilla derecha y, pese a que se quedó unos minutos para probarse, tuvo que ser sustituido por Yunus. Tras la primera exploración, los servicios médicos del Valencia no quisieron aventurarse a diagnosticar la lesión, esperándose a las pruebas que le serán realizadas este lunes. Eso sí, a Correia se le vio abandonar el Villamarín apoyado en muletas.
Menos gravedad parecen tener los otros dos jugadores 'tocados'. El primero en marcharse antes de tiempo (minuto 22 de la segunda parte) fue Carlos Soler. El propio canterano aseguró en la televisión con derechos que se trataba de "unas molestias en el aductor", dejando en el aire que esté para jugar el próximo miércoles ante Osasuna: "Vamos a ver".
Llaman la atención unas palabras también de Soler para explicar las lesiones: "Son muchos partidos". Y aquí hay que tener en cuenta la escasa capacidad de Javi Gracia de rotar, ya que utiliza de inicio a los mismos futbolistas siempre, salvo algún contratiempo como en esta ocasión fueron las sanciones de Gabriel y Maxi Gómez.
Y una prueba de esta inmovilidad de ideas de Gracia está en el centro del campo, donde además de Soler el otro fijo es Racic, el tercero en marcharse antes de tiempo del Villamarín con problemas físicos. El serbio, que llegaba tocado con unas molestias en el glúteo izquierdo que le impidieron ejercitarse el jueves, no aguantó más y en el minuto 81 se fue al suelo pidiendo el cambio con molestias musculares en la zona afectada.
Ahora, falta por ver cómo están los tres teniendo en cuenta que en apenas cinco días le vienen dos partidos: el miércoles en Pamplona ante Osasuna y el sábado, en Mestalla, ante el Alavés.
Piccini, la cara positiva
La buena noticia la protagonizó Cristiano Piccini, que volvió a jugar con el Valencia un año y ocho meses después. Desde que se lesionó en agosto de 2019 nada más arrancar la temporada, con una grave rotura de la rótula de su plantilla, no había vuelto a jugar con el Valencia. Sólo sumaba 59 minutos que disputó en la primera parte de esta temporada en el Atalanta.
Gracia no se atrevió a introducirlo en el campo en el minuto 8 por la lesión de Correia (optó por meter a Yunus y retrasar a Wass) pero sí le dio entrada en el minuto 22 de la segunda cuando cayó lesionado Carlos Soler. Se le vio falto de ritmo, pero por lo menos ya acumula sus primeros 23 minutos, esperando que esa maltrecha rodilla derecha no se haya sobrecargado en su reaparición, como sí le ha ocurrido en distintos momentos cuando ha forzado entrenando y luego ha tenido que parar.
Chimo Masmano
Redactor de Deportes en Radio Valencia