La cifra de contagios se estabiliza y esquiva el efecto 'Semana Santa'

Valladolid

La evolución de la pandemia deja un dibujo inédito en el último año. Si hace un año, después de casi un mes de encierro, se empezaban a notar los efectos del confinamiento con una caída de contagios que se prolongó hasta finales de verano, tras la tercera ola, en mediados de febrero comenzó una nueva fase sigue prácticamente igual casi dos meses después.

El proceso de vacunación -sumado a que cada vez más personas han superado la enfermedad- es la principal clave que puede explicar unos datos que desde el 14 de febreto ha tenido su pico máximo hace dos semanas, el 8 de abril, cuando fueron comunicados 92 casos en la provincia.

El comportamiento de lo que algunas voces califican de cuarta ola está siendo, al menos hasta el momento, muy diferente a lo que habíamos visto hasta ahora, si bien las autoridades sanitarias han insistido, una vez más, en los mensajes de precaución y en la necesidad de mantener todas las medidas de seguridad personales, como el uso de la mascarilla y la distancia, para evitar que estos datos empeoren en las próximas semanas.