La perspectiva de género en el diseño y desarrollo de nuestras ciudades
Tere Chamizo
Jerez de la Frontera
Todas las personas no somos iguales ni tenemos las mismas necesidades. Una misma calle o plaza no es vivida de igual manera por todas las personas, la percepción es diferente si eres mayor, una niña, un hombre o mujer que empuja un carrito de bebé o de la compra, una persona en silla de ruedas... Resulta necesario contemplar todas estas necesidades de manera diferenciada para conseguir espacios inclusivos para todo el mundo y que el espacio público pueda ser utilizado en igualdad de condiciones.
El urbanismo tiene un impacto fundamental en la vida y el bienestar de las personas, pues de él depende la configuración de los espacios que determinan las relaciones sociales y el acceso a los servicios de la ciudad en el día a día.
Estas desigualdades afectan directa y principalmente a las mujeres y quizás esto se deba a las diferencias en los roles y las responsabilidades en el hogar, que a menudo implican que las mujeres asumen más actividades de cuidados.Tambien resaltar que las mujeres suelen tener más preocupaciones con respecto a la seguridad personal en momentos particulares del día.
Recientemente hemos podido ver en prensa, diferentes aportaciones al Plan de Movilidad Urbana y la visibilización e implicación de las mujeres en estos procesos es un paso necesario y directo hacia una ciudad más inclusiva e integradora, con lo cual, nuestro Ayuntamiento tiene que crear el espacio para darnos visibilidad.
En otras palabras, una ciudad que facilite un uso igualitario del espacio público atendiendo a las necesidades cotidianas específicas de todo el mundo.