Joan Ribó muestra sintonía con el puerto mientras que su partido, Compromís, suma apoyos para la batalla legal

Valencia

El Alcalde de València, Joan Ribó ha participado este viernes en la reunión del consejo de administración del puerto donde ha coincidido con el presidente de la Autoridad Portuaria, Aurelio Martínez. El Alcalde ha trasladado al consejo la posición del Ayuntamiento que preside y que fue aprobada en el pleno de este jueves con los 17 votos a favor del gobierno municipal y la abstención positiva, ha dicho el alcalde, de la oposición.

Ribó ha comparecido junto a Martínez tras el consejo y ha vuelto a pedir a la autoridad portuaria que valore la posibilidad de realizar un estudio de declaración de impacto ambiental, tal y como aprobó el jueves el pleno del Ayuntamiento.

El Alcalde ha repasado, una por una, las exigencias acordadas en ese texto de la moción aprobada en el pleno, poniendo el énfasis en caminar hacia la descarbonización, la necesidad de que se estudie el impacto paisajístico de las grúas y el impacto del tráfico de camiones.

El alcalde también ha pedido al puerto que cumpla sus compromisos recogidos en la DIA de 2007 para atender los problemas de basculación que tienen las playas del norte y del sur. Una afección sobre las playas cuyo causa principal, ha dicho Ribó, no es el puerto, aunque su ubicación y configuración condiciona:

El alcalde ha reclamado también acelerar proyectos como el túnel pasante para evitar el estrangulamiento del túnel de Serrería y mejorar la competitividad del puerto. En ese sentido Ribó se ha felicitado de que el puerto siga apostando por el transporte ferroviario de mercancías y que vaya a potenciar una estación intermodal en Sagunt.

El presidente del puerto, Aurelio Martínez, no ha concretado si hará declaración de impacto ambiental pero sí ha dicho que tienen mucho interés en hacerlo bien en cada paso que dan de cara a una posible judicialización del asunto.

Martínez se ha mostrado satisfecho con el acuerdo aprobado el jueves por el pleno del Ayuntamiento de València, aunque ha hecho puntualizaciones. Sobre la descarbonización del Puerto y alcanzar el nivel cero de emisiones en 2030, asegura que es uno de los objetivos buscados con ese proyecto precisamente porque se reducirán las emisiones de CO2 en un 98%.

Por otra parte, Aurelio Martínez asegura que una de las causas del retroceso de las playas se debe a la acción humana sobre el rio, porque se redujeron las aportaciones de agua al mar en un 48% y por tanto, aumentó el retroceso del mar. Se le añade la construcción de viviendas, la eliminación de dunas y, el mismo cambio climático. El 52% restante lo ha causado el Puerto, pero según Martínez fue la ampliación del 86 la que provocó la gran afectación a las playas, no la ampliación norte:

En cuanto al aumento de tráfico en el propio puerto y, por tanto, las dificultades en la movilidad, el presidente portuario recuerda que a la terminal norte llegará sobre todo tráfico de transbordo, es decir, que no mueve contenedores, y además, incluso con el incremento de tráfico, las previsiones hechas en el proyecto es que aumenten en 118 camiones al día, lo que considera que no es excesivo.

Sobre esta moción pactada entre el alcalde Ribó y la vicealcaldesa Sandra Gómez, la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra afirma que siempre se puede llegar a acuerdos y eso es positivo, pero insiste en que el impacto medioambiental de la ampliación será muy negativo.

Por eso, considera que hay que reflexionar mucho sobre este proyecto y sobre el legado que se quiere dejar a las próximas generaciones. Y respecto a si la Autoridad Portuaria debe valorar pedir una nueva DIA, Oltra admite que ese asunto no se ha tratado en el seno del Consell, pero considera que el Ministerio de Transición Ecológica así lo quiere. 

Compromís suma apoyos contra la terminal

Los tres portavoces de Compromís por València se han reunido con la Federación de Asociaciones de Vecinos para crear sinergias y plantear acciones conjuntas contra la que califican de insostenible ampliación del puerto. En un comunicado se asegura que el proyecto plantea la construcción de un mega polígono industrial en la fachada marítima de València, que amenaza de muerte, según estos interlocutores, los barrios marítimos de la ciudad así como las playas del sur.