"No procede que continúe el toque de queda sin estar vigente alguno de los estados excepcionales"
El profesor de Derecho Constitucional, Gerardo Pérez Sánchez, asegura que el margen de las comunidades para arbitrar medidas se limitará a los aforos en espacios públicos o establecer requisitos a la movilidad
El Gobierno confía la decisión final sobre las restricciones a los derechos fundamentales al Tribunal Supremo
Tenerife
A solo tres días de que finalice el estado de alarma, las comunidades autónomas siguen sumidas en la incertidumbre. De momento, Canarias ya ha mostrado su voluntad de restringir la movilidad por franjas horarias, mantener los controles en puertos y aeropuertos y limitar las reuniones. Sin embargo, los expertos avisan de que muchas de esas medidas no van a ser posibles. "Todo lo que afecta a derechos fundamentales: libertad de circulación, libertad de movimiento, de reunión o manifestación, no puede limitarse ni mucho menos suspenderse sin que esté vigente un estado excepcional bien sea el de alarma, excepción o sitio", advierte el profesor de Derecho Constitucional Gerardo Pérez Sánchez.
Para garantizar las medidas que atañen a esos derechos fundamentales, el Gobierno central ha impulsado una nueva maniobra que pasa por el obligatorio aval judicial y dejar en manos del Tribunal Supremo las decisiones finales. Aún así, las regiones temen acabar en un limbo legal y envueltas en órdenes judiciales contradictorias. Bajo la interpretación de Sánchez, "el margen de las comunidades es muy pequeño, es posible que puedan limitar los aforos de espacios públicos y establecer algunos requisitos de la movilidad, pero en modo alguno suspender o limitar esa movilidad".
Asimismo, el profesor asegura que "no teníamos que haber llegado a esta situación" y recuerda de que los académicos y docentes vienen denunciando desde el año pasado que "nuestro ordenamiento jurídico necesitaba una revisión porque no tenía las herramientas adecuadas para afrontar este tipo de problemas".
Otra suerte correrá el uso obligatorio de las mascarillas, que según señala el experto sí podrá seguir arbitrándose gracias a "una ley que establece su uso sin exigirse el estado de alarma".