Urge una victoria para evitar sustos
Voro se reestrena como entrenador del Valencia, por séptima vez, y aparece para dar el último empujón hacia la salvación frente a un rival que está peor: un Valladolid que, en medio de una mala racha, llega amenazado por el descenso
Voro, al frente de un entrenamiento con el Valencia. / VCF
Valencia
Pues ya estamos aquí otra vez. Podríamos recurrir a un texto de hace un año, cuatro o trece. Vuelve a salir Voro al rescate. Esta vez la misión encomendada tiene doble filo: el objetivo de la salvación hay quien lo da por hecho, por la distancia con los puestos de descenso y los continuos fiascos de los equipos instalados abajo; pero también los hay que son más escépticos. Y con razón, porque un tropiezo ante el Real Valladolid, uno de los que huye del fuego del descenso, puede meter en problemas al Valencia.
Tiene el equipo de Voro en su mano evitar sustos, dando un empujón, en forma de victoria, que acerque al barco a la orilla y evitar nervios y noches en vela antes de viajar a Sevilla o de enfrentarse a vida o muerte ante el Eibar o el Huesca. Una victoria ante el Valladolid y asunto terminado. Para esto debe hacerse notar, una vez más, el efecto Voro, que en otras ocasiones ha servido para hacer buena la máxima de "entrenador nuevo, victoria segura".
Pero no es fácil pedirle una victoria porque sí al Valencia. Al menos no lo era con Gracia en el banquillo. De ahí que se necesite el efecto Voro para acabar con una racha de seis partidos sin conocer la victoria: la última llegó el 21 de marzo en Mestalla frente al Granada. Ese día se le paró el reloj al Valencia de Gracia, que vio truncada hasta la buena racha que había encadenado en Mestalla solucionando los desaguisados como visitante. Así, llegaron dos empates ante la Real Sociedad y el Alavés y la derrota de la pasada semana ante el Barça en los tres últimos precedentes en Mestalla.
Ha podido completar toda una semana de preparación Voro con la mente puesta en esta 'final' ante el Valladolid. Tiene a todos los jugadores a su disposición (ha hecho dos descartes en su primera convocatoria: Álex Blanco y Cutrone) y le ha dado tiempo a probarlo todo, haciendo especial hincapié en el sistema que empleó Gracia en su último partido frente al Barcelona. Y no solamente el dibujo, sino que el de L'Alcúdia ha ensayado repitiendo con diez de los once escogidos por su predecesor hace una semana, con el cambio de Ferro por Lato en la defensa de tres centrales que completan Gabriel y Guillamón, con Correia y Gayà en los carriles; el trivote en centro del campo Wass-Soler-Racic y la pareja Guedes-Maxi en ataque. Aunque puede haber una variación de dibujo en la media y ataque, con Soler y Racic por el centro, Wass y Guedes en los costados y Maxi solo en punta. Manteniendo a Cillessen bajo palos.
Enfrente llega jugándose la vida el Real Valladolid, que sólo ha ganado uno de los últimos 17 partidos y, además, ha perdido por lesión a uno de sus mejores hombres, el ex valencianista Orellana. El once por el que podría apostar Sergio González para intentar sorprender en Mestalla es el compuesto por: Masip; Janko, Joaquín, El Yamiq, Olaza; Jota, Alcaraz, Roque Mesa, Plano; Marcos André y el enrachado Weissman.
Chimo Masmano
Redactor de Deportes en Radio Valencia
