6.500 personas desalojadas de botellones en Barcelona en el final del toque de queda

A medianoche se ha acabado el Estado de Alarma y con él, el toque de queda que obligaba a recluirse en casa a las 10. Pero en Cataluña el ocio nocturno sigue prohibido y las discotecas se mantienen cerradas. La imagen, con decenas de jóvenes haciendo corrillos mientras beben, sin mascarilla ni distancia social, corresponde a esta pasada noche, al barrio de Gracia de Barcelona. El teniente de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, ha explicado en diferentes medios que la Guardia Urbana, en coordinación con los Mossos dEsquadra, ha desalojado cerca de 6.500 personas de 31 espacios distintos de la ciudad la madrugada de este domingo Una situación que ya denunció esta semana en el programa ‘Aquí Cuní’ de SER Catalunya el secretario de la patronal del ocio nocturno Fecasarm, Joaquim Boadas: “Lo que se va a producir es un descontrol total, habrá muchas más fiestas ilegales y muchos más botellones que había hasta ahora. Ante una oferta legal nula imperará la competencia desleal y el descontrol, imposible de controlar por parte de las policías.” “Si no se nos ha visto como un aliado imprescindible ha sido un error por parte de las administraciones que llegan tarde. Con los espacios legales cerrados y con todo el mundo amontonado en fiestas en las que beberán de la misma botella, sin distancia de seguridad y sin que nadie lleva mascarilla, sin derecho de admisión y sin que nadie pase una prueba previa, esto provocará muchos contagios y problemas de seguridad.” Boadas afirma que “No hemos sido escuchados, se nos ha olvidado totalmente por parte de los departamentos de salud e interior” Fecasarm asegura que tienen la solución definitiva y reclama una prueba piloto para reabrir el ocio nocturno: “La desinfección de aire y superficies que actúa en tiempo real, que mejorará incluso las medidas que se tomaron para el concierto piloto de Love of Lesbian”