Para la libertad

La Opinión de Juan Miguel Alonso (11/5/2021)
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León
La gente se rasga las vestiduras y llora por los rincones la pérdida de Madrid, como si ellos fueran Boabdil y en Madrid no hubiera gobernado la derecha desde hace 26 años, desde Joaquín Leguina que ahora, por cierto, también es muy de derechas.
El personal lamenta también compungido la apoteosis voxquimana en la capital, pero se olvidan de que aquí, en el mismo campamento romano, los superpatriotas sacaron 40000 votos en las últimas elecciones y un diputado, aunque nadie sepa cuál es su nombre ni a qué se dedica.
Casi nadie repara en que entre los horrores matritenses destaca la batalla por el lengua y el diccionario, que la derecha ha hecho suyo sin que nadie diga ni pío.
Que la Ayuso y la extrema derecha coloquen la palabra libertad en sus carteles produce asombro entre quienes peinamos canas o directamente una bola de billar. Esta tropa es la misma que votó en contra del divorcio, del aborto, del matrimonio homosexual, de la eutanasia, o de la ley de Igualdad. ¿Libertad? ¿ De verdad?
Pero más perplejidad causa que la izquierda no haya sido capaz de hacer frente a esta mentira parvularia, que se haya enfangado en las miserias de un discurso tramposo, que no hayan fiscalizado la gestión criminal de la pandemia, que no hayan abierto un hueco de la esperanza, que no hayan arrojado luz sobre la corrupción sistémica y la confusión permanente y tan lucrativa entre lo público y lo privado.
Si los tahúres zurdos no son capaces de hacerse unos ejercicios espirituales profundos , y siguen dejando la acción política en manos de los gurús de turno, en muy probable que el de Madrid no sea el último lamento de este rosario.




