Osasuna vende cara su derrota en el Metropolitano

Madrid

Osasuna planta cara a todo un Atlético de Madrid que se jugaba la liga en el Wanda Metropolitano. Los rojillos vendieron cara su derrota y hasta el último instante pelearon por sacar algo positivo del estadio rojiblanco. Sergio Herrera con sus paradas y los postes, frenaron el monólogo ofensivo del Atlético en la primera parte. Budimir con su undécimo gol en liga adelantaba a Osasuna a quince minutos para el final pero Lodi primero y Luis Suárez después, le daban la vuelta al partido para acercar el título de liga a Neptuno.

Curiosamente "todos a una" probablemente fuera trending topic por el título de liga. Primero por parte de los aficionados del Atlético de Madrid criticando la profesionalidad de Osasuna plantando cara a todo un aspirante al título. Y después las críticas vinieron de los seguidores del Real Madrid al ver como remontaba el conjunto colchonero y su victoria complicaba la liga para los blancos. Está claro que no se puede contentar a todos pero a quién se debe Osasuna es a su afición, no a los que animan a unos u a otros según les interese. Y ahí queda claro que poco se le puede reprochar al conjunto rojillo que vendió cara su derrota en el Wanda Metropolitano.

Jagoba Arrasate apostó por las rotaciones como suele hacer habitualmente y más con tres partidos en una semana. Siete cambios con respecto al martes ante el Cádiz donde solo repitieron los centrales Unai y David García, además de Rubén García y Budimir. Sorprendió el técnico de Berriatua con cambio de sistema, 3 centrales, por la izquierda Juan Cruz y con Ramalho y Rubén García en los carriles. El mejos con diferencia de Osasuna fue Sergio Herrera con sus paradas y donde no llegaba él, ahí estaban los postes para evitar el gol atlético hasta el descanso.

Osasuna ponía patas arriba la liga a falta de quince minutos para el final. Ante Budimir no faltaba a su cita con el gol por tercera jornada consecutiva. Undécimo tanto del delantero croata, séptimo de cabeza para adelantar a los rojillos aprovechando un certero servicio desde la banda de Rubén García, máximo asistente con 5 pases de gol. Poco le duró la alegría a Osasuna que veía como Lodi empataba solo 6 minutos después y Luis Suarez en el 87 hacía el 2-1 para delirio rojiblanco.

Hasta el final lo siguió intentando Osasuna primero por medio de Ramalho que obligó a intervenir a Oblak. Y con el tiempo casi cumplido Chimy Ávila de nuevo puso a prueba a uno de los mejores porteros del mundo y el esloveno evitó el empate. Osasuna se marcha del Wanda Metropolitano de vacío pero con la cabeza alta, plantando cara hasta el final al principal candidato al título de liga. Osasuna con los deberes hechos desde hace jornadas, despiden la temporada el próximo domingo en el Sadar ante una Real Sociedad que se juega Europa.