Toque de queda y botellón

Valencia

El botellón se ha convertido en el enemigo a batir en esta progresiva desescalada a la que estamos asistiendo. Y es cierto, el riesgo de contagio aumenta exponencialmente cuando se comparte la bebida. La Generalitat ha entendido que una forma de evitarlo es extendiendo más días el toque de queda. Pero, que no haya gente en la calle bebiendo no quiere decir que no haya botellón. ¿O acaso no hemos visto a jóvenes pertrecharse en los supermercados con litros de alcohol para hacer ese botellón en algún piso de forma furtiva?

Sinceramente, erradicar esta práctica no es sencillo, no lo es ahora, ni lo era antes de la pandemia. Y si no, que se lo digan a los vecinos de muchos barrios que antes del coronavirus se venían quejando de consumo de alcohol en parques y jardines. Ni policía, ni toques de queda.

Botellón ha habido, hay y habrá siempre porque es algo cultural complejo de cambiar. Pero hay que intentarlo. Toca educación, educación y mucha educación.