Las obras de la discordia en la calle Mayor Antigua de Palencia

Palencia

Están a punto de acabar. El espacio que abarcan no es muy amplio; pero pocas veces una actuación municipal que, a priori podía pensarse que iba a ser positiva, ha generado tanta polémica. Nos referimos a las obras que el Ayuntamiento de Palencia está acometiendo en la céntrica Calle Mayor Antigua de la ciudad, en una zona próxima al Palacio Episcopal. Los trabajos han enfrentado a vecinos y ayuntamiento en una agria polémica en la que también ha intervenido el Grupo Socialista que, aunque en su momento apoyó la actuación, recordó luego que no se les había facilitado toda la información en la comisión pertinente.

El detonante de la controversia se produjo a través de la denuncia que a principios de mazo hizo la Asociación de Vecinos de San Pablo y Santa Marina, barrio al que pertenece la mencionada calle. En un comunicado, el movimiento vecinal señalaba que "por sorpresa, los vecinos se encontraron con unos mensajes en las cocheras de la calle Mayor Antigua y otras calles del barrio, transmitiendo que a partir del día 3 no se puede entrar ni salir de las cocheras, sin especificar horarios ni el motivo, Que han deducido que es por obras ya que han visto a operarios trabajando.

Les parecía "inadmisible", no el hecho en sí de que se arregle el barrio, cosa que "reclaman cada año y el Ayuntamiento no tiene a bien atender nuestras demandas ni consensuarlo con nosotros", sino que "se tengan que enterar de un día para otro sin saber a ciencia cierta lo que se va a realizar y con la falta de aparcamientos que tienen en su barrio". Las siguientes críticas partieron delGrupo Socialista en el Ayuntamiento de Palencia,el grupo que lidera Miriam Andrés Han pasado los meses hasta llegar al día de hoy y la polémica se acrecentaba por momentos.

Los socialistas visitaron la zona y criticaban la falta de criterio del Equipo de Gobierno a la hora de acometer la actuación. La portavoz del Grupo, Miriam Andrés, acompañada por una representación de vecinos y vecinas de la zona, recorrían recientemente los trabajos ya realizados en los que se detectaban "actuaciones sin ningún sentido como la colocación de grandes alcorques para ubicar nuevos árboles, eliminando un importante número de aparcamientos y dificultando la entrada a las cocheras allí existentes", según su versión.

Quedaba otro capítulo por cerrar, la reacción del concejal de Obras ante las críticas de vecinos y oposición. Criticó lo que considera oportunismo del partido Socialista. Recordó que en la Comisión de Obras de hace justo un año "no sólo aprobaron y alabaron los socialistas la obra sino que el propio concejal de ese grupo, Luis Muñoz propuso elevar la altura de los alcorques para permitir que las personas pudieran sentarse". Recordó que es una actuación enmarcada dentro de las obras de mejora de los entornos de la Catedral de Palencia que busca hacer de la ciudad un espacio cada vez más amable con el peatón".

Esta respuesta no satisfizo a algunos vecinos visiblemente soliviantados por los inconvenientes que ha provocado la actuación municipal y por el resultado de esas obras. En redes algún vecino ha llegado a acusar al edil responsable del área de obras, Facundo Pelayo, de no decir la verdad. Lo que se preveía como una actuación amable en la búsqueda del adecentamiento de las inmediaciones de la Catedral, se ha convertido en enfrentamiento y discordia. La raza 'virtud' de convertir en negativo lo que parece positivo.