Los constructores piden revisar los contratos públicos para evitar la ruina por el 'boom' de los fletes

Santa Cruz de Tenerife

El reestablecimiento del flujo internacional de mercancías tras los meses de parón obligados por la pandemia ha dejado consecuencias problemáticas para las empresas de Canarias. Los costes de los fletes se han multiplicado hasta por 5 para las mercancías importadas de Asia, lo que trae de cabeza, especialmente, al sector de la construcción.

En un territorio como el nuestro, donde casi todo ha de importarse y donde el 90% de los materiales que emplean los constructores se traen de Asia, que un contenedor pase de 1.400 a 6.400 euros en un solo año supone el descalabro total de las cuentas de cualquier empresa. El mayor problema al que se enfrentan es el de las obras públicas, contratos que ya tenían cerrados a un precio y que ahora no pueden cumplir sin perder fuertes sumas de dinero. José Gestoso, el representante de la patronal de la construcción tinerfeña Fepeco para las relaciones con el puerto, plantea la necesidad de que se puedan repercutir al menos un 70 u 80 por ciento del sobrecoste. De lo contrario, según explica, no tendrían forma de evitar la ruina. El presidente de Fepeco, Óscar Izquierdo, destaca que no se trata de una revisión generalizada de todos los contratos, sino solamente de aquellos que se firmaron antes de la pandemia y que ahora "se han visto afectados por esta situación, insostenible para las empresas".

Todos los sectores sufren este problema en mayor o menor medida. En realidad es una situación que se da a escala internacional, ya que Asia es desde hace bastante tiempo la fábrica del mundo. Textiles, material sanitario, componentes tecnológicos... La industria canaria también está afectada. Lo que ocurre es que ellos no tienen un porcentaje tan alto de importaciones de Asia. Traen también de la Península y el resto del Sur de Europa. El coste de esos fletes también ha subido, pero entre un 9 y un 10%, frente a casi el 500% de los de Asia. Andrés Calvo, gerente de Químicas Ascanio, señala que en estos momentos hay mucha más demanda que oferta de fletes, lo que deriva en un incremento de los precios.

En cuanto a la causa de que estos costes se hayan disparado, hay disparidad de opiniones. Los constructores sostienen que se debe a que se ha creado un 'pool' de las navieras que operan con Asia porque han visto que tienen la posibilidad de ganar lo mismo con menos barcos, y que esa estretegia les resulta más ventajosa. Reclaman que el Gobierno canario reclame la intervención de la UE. En cambio, otros sectores lo ven como un problema coyuntural, aunque, eso sí, abogan por vigilarlo. Calvo aboga por apelar a la Comisión Nacional de Mercados y Competencia para detectar si es posible que se estén dando estas prácticas especulativas.

Las islas menores lo tienen aún peor, porque las navieras han eliminado las escalas, con lo cual hay que sumar lo que cuesta la doble insularidad. En todo caso, las empresas que reciben sus mercancías en el puerto chicharrero se topan aún con más sobrecostes debido a la lentitud de los depachos. José Gestoso denuncia que eso hace que tengan que añadir otro sobrecoste, el del retraso en la devolución de los contenedores vacíos.

Por lo pronto, además de reunirse con la Autoridad Portuaria para pedirles aligerar los despachos, Fepeco reclama a todas las administraciones canarias que revisen los precios de las obras públicas que tienen contratadas con ellos. Aseguran que es una medida necesaria para salvarlos de la ruina. Ya han mantenido contactos además con el presidentedel Cabildo de Tenerife, Pedro Martín, y con la presidenta de la FECAM, Mari Brito. Óscar Izquierdo ha explicado que Brito se ha comprometido a abordar el problema en la próxima asamblea de alcaldes para tratar de buscar una solución.