Un informe sobre el edificio de FP alerta de grietas estructurales por el hundimiento de la cimentación

Alicante

Un informe de inspección del edificio de ciclos formativos del IES Virgen del Remedio al que ha tenido acceso Radio Alicante, alerta de la aparición de grietas estructurales en todas las aulas como consecuencia, a priori, del hundimiento de la cimentación.

Recordamos que el equipo directivo del instituto decidió, el pasado mes de abril y ante la indefinición tanto de la Conselleria como del Ayuntamiento, clausurar por precaución el inmueble ante el importante incremento de grietas y desperfectos de semanas anteriores.

El Ayuntamiento realizó una inspección que apunta a una fuga de agua como la posible causa de los desperfectos. Conclusiones que trasladó a la Conselleria de Educación, al ser los responsables del mantenimiento de los institutos públicos, para que realice las actuaciones pertinentes.

Pero ante la falta de respuesta de las administraciones, el propio instituto solicitó este informe de inspección a una empresa privada el pasado mes de mayo. Informe que añade que la decisión de clausurar el edificio fue la correcta ante el peligro de caída de materiales sobre los usuarios. Y destaca la necesidad de realizar un estudio geotécnico para conocer exactamente los daños y la causa del hundimiento de la cimentación.

Este edificio, recordamos, fue un proyecto del equipo de gobierno de Sonia Castedo para ampliar el instituto y fue inaugurado en 2015. Estaba presupuestado inicialmente en cerca de siete millones de euros, pero el precio de licitación se quedó en algo más de cuatro millones. Finalmente, fue adjudicado por 2 millones y medio de euros con mejoras. Tras las obras, el Ayuntamiento cedió la gestión y el uso del inmueble a la Conselleria de Educación como ampliación del instituto, aunque el edificio sigue siendo de propiedad municipal.

Desde el inicio ha presentado problemas y deficiencias. Han aparecido goteras, filtraciones de agua, fugas de aguas fecales por los desagües, desperfectos en las bombas de aguas fecales y de legionela, entre otros. El equipo directivo del instituto, en sus reiterados escritos tanto al Ayuntamiento como a la Conselleria, considera que se trata de problemas relacionados con la construcción y la calidad de los materiales.

Problemas que han ido solventando la empresa constructora, OHL, o el propio centro. Incluso en 2018 se rompió una junta del depósito de agua para incendios, provocando su vaciado por completo. Tras ser arreglado por parte de OHL, la Concejalía de Urbanismo da por buenas esta y otras subsanaciones y decide devolver la garantía a la constructora. Desde el Ayuntamiento apuntaron que el resto de deficiencias correspondían a problemas de mantenimiento del centro. "No existiendo en algunos casos un uso apropiado de las instalaciones", llegaba a señalar.

Poco después, en 2019, es cuando comienzan a aparecer las primeras grietas importantes, provocando el desprendimiento de azulejos en los aseos de los docentes y desperfectos en otras aulas del inmueble, hasta llegar a la situación actual que provocó el desalojo del inmueble en abril.

Baja temeraria

Por su parte, desde la oposición, el portavoz socialista Paco Sanguino apunta que todos estos problemas podrían deberse a la baja temeraria con la que se adjudicó la obra del edificio. Por ello, estudia pedir una comisión de investigación para depurar responsabilidades.

En cualquier caso, añade que lo más urgente ahora es ver qué solución se va a dar a los alumnos que fueron desalojados para que puedan seguir estudiando el próximo curso, mientras se arreglan los problemas estructurales del inmueble.