Con las urgencias sociales no nos podemos relajar ni una pizca

Alicante

Es el momento de la recuperación económica, social y emocional, decía el president Ximo Puig. Y por ello, se acabó el toque de queda y las discotecas podrán abrir hasta las dos de la madrugada, entre otras medidas.

Ampliar

Sin duda, hay que avanzar hacia la normalidad aunque dé un poco de vértigo y haya quien piense que hay un exceso de relajación que no nos podemos permitir desde un punto de vista sanitario. Y es que la lógica relajación debe ir siempre acompañada de la prudencia, que siempre es una buena compañera de viaje. Pero también es cierto que es fundamental reparar las profundas heridas psicológicas de la pandemia.

Sin olvidar que hay otras muchas cosas que restañar. Y es que las playas se van a llenar este verano, pero las urgencias sociales de miles de alicantinos van a seguir. Es el mensaje que nos mandan desde Cáritas y que nos lleva a esa parte oculta de la crisis: a las colas del hambre o al pago del recibo de la luz y del agua, que siguen necesitando muchas familias.

Unas necesidades que en gran medida se han cubierto por la solidaridad de la socieda, por ese altruismo ejemplar. Y desde este punto de vista, como nos dicen desde Caritas, pero también desde otros muchos colectivos, no nos podemos relajar ni una pizca. Lamentablemente.