La fragilidad defensiva condena al Valencia Basket en el primer asalto con el Madrid
Los blancos capturaron más del doble de rebotes ofensivos y no se acordaron de sus numerosos lesionados para aniquilar en ataque a un Valencia Basket que nunca fue por delante en el marcador; el martes, segundo asalto de semis en la Fonteta
Valencia
Empezó el Real Madrid en quinta marcha y el Valencia Basket, con la "torrija" (término acuñado por el propio Jaume Ponsarnau) que ya le acompañó en su última salida a Vitoria. Impreciso con pérdidas en ataque y viéndose superado por el dominio blanco en los rebotes ofensivos en la pintura taronja. Así llegó el parcial inicial 9-2. Mal en defensa, tarde y mal, sólo capaces de parar al Madrid en forma de falta, con dos personales en menos de un minuto de Joan Sastre. El Madrid se puso 10 arriba (14-4) y Kalinic tiró de los suyos para intentar acercarse a los locales, con sendas canastas de Tobey y Prepelic. El Madrid seguía golpeando desde la línea de tres y amedrentando con su poderío físico al rebote pero un parcial 0-6 metió al Valencia Basket en el partido. Pero un triple de Causeur iba a poner de nuevo tierra de por medio para cerrar el primer cuarto 25-14.
Empezó el Real Madrid el segundo cuarto como terminó el primero: pisando el acelerador, con un parcial 5-0 que llevó a los blancos a obtener su máxima renta: +16. Pero emergió entonces el de siempre en el Valencia Basket: Dubljevic, que lideraría a su equipo para sumar un parcial 2-10, con 8 puntos del montenegrino, de quien ya conocemos su relación especial con el Wizink Center.
Había remado el Valencia Basket, pero de nuevo se lo iba a llevar la corriente. Sus imprecisiones en ataque dieron oxígeno al Real Madrid, que con un triple de Taylor (fue una tarde con un porcentaje de acierto blanco muy elevado desde la línea de tres) volvió a tomar una renta de +14. Pero echó mano Ponsarnau en la recta final del cuarto de su primera unidad y ésta le respondió, con el acierto de Kalinic, Van Rossom y Tobey, que anotó uno de sus habituales triples liberados para acercarse en el marcador y dejar a los suyos en el partido. Así llegó el descanso 44-38.
El tercer cuarto tuvo dos mitades bien diferenciadas. En los primeros minutos el Valencia Basket estuvo a punto de dar caza, por primera vez en el partido, al Real Madrid. Un triple de Sastre, que fue el primero de un jugador exterior taronja en el partido, acercó a los taronja y les dio la posibilidad de colocarse a tres puntos. Pero, una vez más, fue remar para morir en la orilla. El Madrid volvió a mostrarse imponente bajo los aros (emergió la figura del joven Usman Garuba) y muy acertado en ataque, lo que le llevó a marcharse con una cómoda ventaja al final del tercer cuarto: 58-46.
Y llegó el último cuarto que sólo sirvió para reafirmar la debilidad defensiva del Valencia Basket (sirva de ejemplo la lamentable actuación de Derrick Williams) y el gran acierto de un Real Madrid que llevó a la lona al equipo taronja (los triples de Causeur caían como los ganchos recibidos por un boxeador a punto de arrojar la toalla). Con un mérito todavía mayor para el Madrid, que a medida que pasaban los minutos iba viendo cómo se le caían los efectivos con lesiones y problemas físicos, como Rudy y Garuba, que se colocaban en el banquillo junto a los lesionados Thompkins, Randolph, Llull y Laprovittola (Abalde y Reyes, en su casa con covid). Un parcial 2-10 para los taronja sólo serviría para maquillar por momentos el resultado. Pero ni aún así: lo único bueno que dejaron los últimos minutos es ver al joven Pradilla dando trazos de lo bueno que puede aportar. El primer asalto entre blancos y taronjas acabó 81-70.
Chimo Masmano
Redactor de Deportes en Radio Valencia