Dos detenidas por robar joyas mediante el "hurto cariñoso" en Móstoles

Móstoles

La Policía Nacional ha detenido en Móstoles a dos mujeres que sustraían joyas mediante el "hurto cariñoso" una de las cuales en el momento del arresto se escondió algunos de los objetos en el interior de la vagina para evitar que los detectaran.

Fue el pasado 28 de mayo cuando una de las víctimas llamó al 091 para denunciar que momentos antes había sido asaltada mientras paseaba con sus perros por la calle, informa la Policía Nacional.

La denunciante relató que una mujer se le acercó, haciéndole creer que la conocía, y tras entablar una conversación muy amigable se despidió de ella de manera muy cariñosa, llegando a abrazarla y besarla en reiteradas ocasiones. Luego abandonó el lugar en compañía de otra mujer.

Fue entonces, cuando la víctima se percató de que le faltaba el collar que llevaba.

Varios agentes se desplazaron al lugar y localizaron en las inmediaciones a dos mujeres que tenían las características que la víctima había aportado.

Tras proceder a su identificación en el cacheo los agentes localizaron un collar de oro a una de estas mujeres, diferente al descrito por la denunciante.

Los policías determinaron que ese collar procedía de otro hurto que habían perpetrado con anterioridad ese mismo día, averiguando la identidad de la víctima, a la que le hicieron entrega del mismo.

Una vez que los agentes efectuaron el arresto de las dos mujeres fueron trasladadas a dependencias policiales y allí una de ellas entregó voluntariamente la joya que ambas acababan de sustraer, propiedad de la denunciante, y que llevaba escondida en el interior de su vagina para evitar su detección.

Posteriormente, fueron puestas a disposición judicial como presuntas responsables de tres delitos de hurto.

Además, una de estas mujeres tenía en vigor una orden de búsqueda y detención por otro hecho similar.

El método del "hurto cariñoso" se ejecuta cuando una o varias personas se acercan a la víctima, generalmente de avanzada edad y que lleva algún metal precioso o un ornamento de oro de gran valor.

De manera cariñosa comienzan a tocar a la persona, dando diferentes excusas para intentar ganarse su confianza, parecerse a algún familiar, conocerse de otra ocasión pasada, pedirles ropa usada o vieja, limosna, incluso ofrecer sexo a cambio.

Durante esa maniobra consiguen apropiarse de la joya y al marcharse del lugar es cuando las víctimas se percatan de la sustracción.

Otro tipo de "hurto cariñoso", es llevado a cabo por varias personas, generalmente un hombre y varias mujeres, que estacionan un vehículo para solicitar una información sobre un centro de salud, clínica u hospital del tal forma que mientras la víctima facilita las explicaciones, las mujeres aprovechan para sustraer las joyas.

Este procedimiento suele ser empleado por un grupo de delincuentes itinerantes que se desplazan por toda la geografía española, lo que dificulta la identificación de los autores y con ello la persecución policial.