La pandemia también pasa factura al transporte público

Logroño

La pandemia también ha pasado factura al transporte público de viajeros. En dos vertientes. Por un lado, ha caído el número de viajeros como consecuencia de las medidas de seguridad y las limitaciones de aforo. Por otro lado, se ha aumentado el gasto al que deben hacer frente las administraciones ante la sensible reducción de los ingresos como consecuencia de la caída de la recaudación. Una factura a la que han tenido que hacer frente el Gobierno de La Rioja y el Ayuntamiento de Logroño. Ambas instituciones han recibido fondos adicionales del Estado para compensar este aumento del déficit, al igual que el Consistorio de Calahorra.

Interurbano, metropolitano y rural

El transporte interurbano, metropolitano y rural cerró 2020 con un déficit de algo más de un millón de euros, hasta alcanzar la cifra de 3,5 millones de euros. No obstante, el director general de Infraestructuras, Vicente Urquía, revela que la tendencia está cambiando y avanza que, si la situación sanitaria lo permite, se podrá reanudar el servicio nocturno a partir de la segunda quincena de julio.

Urquía asegura que la movilidad restringida de los primeros meses de la pandemia y los aforos reducidos han llevado a ese déficit del transporte publico del Gobierno de La Rioja, que engloba al metropolitano, el interurbano y el rural. Un déficit que se debe a la reducción de un 40% por de los viajeros, que se situaron ligeramente por debajo de los 790.000 usuarios.

Sin embargo, la mejora de la evolución de la pandemia y el ritmo de vacunación ha llevado a que cada día sean más los usuarios. No se ha recuperado por el momento el mismo volumen de viajeros de antes de la pandemia, pero la evolución es positiva.

Y precisamente estos es lo que lleva en estos momentos a estudiar y analizar la reanudación del servicio nocturno, el búho, entre los municipios. En cualquier caso no serán todos los servicios. Urquía pronostia que será a mediados de julio cuando comience a funcionar.

Transporte urbano de Logroño

El déficit del autobús urbano en Logroño aumenta en casi un 40% en 2020 a causa de la pandemia en 2020 hasta superar la cifra de 3,8 millones de euros. El Ayuntamiento ha recibido una ayuda del Gobierno Central de 1,89 millones de euros para paliar estas pérdidas.

Unas pérdidas que se disparan y que tienen su causa en el notable descenso en el número de viajeros, de acuerdo a los datos proporcionados por el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Jaime Caballero. El número de viajeros en 2020 casi a la mitad, en concreto un descenso del 46% respecto al año anterior.

Todo ello ha conllevado una disminución en los ingresos provenientes de los billetes de autobús de los pasajeros. Se ha recaudado un 44% menos que en 2019.

Eso sí, este aumento del déficit encuentra un alivio en las subvención que Logroño recibe del Gobierno Central. Esa subvención de 1,89 millones de euros ayudará a compensar ese desequilibrio del transporte público en Logroño, un servicio que ha sido y es esencial en la ciudad.