La sala que juzga la violación grupal de Callosa d'En Sarrià evita a la víctima oir el relato de los hechos
En la segunda sesión del juicio, las partes también han renunciado a visionar la grabación de la presunta agresión ante la chica a quien solamente se le ha preguntado por el consumo de alcohol y drogas
:quality(70)/cloudfront-eu-central-1.images.arcpublishing.com/prisaradio/RGCD4KC2CNMKLD6NCT7QQKTEFU.jpg)
Uno de los cuatro acusados sube al furón policial, tras finalizar la sesión del juicio por la manada de Callosa / Elena Escudero
Alicante
Este miércoles se ha reanudado en la Audiencia Provincial de Alicante, el juicio contra la conocida como 'manada de Callosa', con la declaración de la víctima de la presunta agresion sexual en grupo el día de Año Nuevo de 2019.
La chica (que entonces contaba con 19 años) ha declarado parapetada por un biombo que le separaba de los cuatro acusados, de entre 19 y 24 años en el momento de los hechos y tras casi dos horas en sede judicial esperando a que la vista, que se ha atrasado por un problema logístico en el traslado de los acusados, comenzara.
Más información
Francisco González, abogado que ejerce la acusación, ha relatado que su clienta estaba "nerviosa y disgustada" por tener que comparecer ante el tribunal y toda vez los acusados ya se declararon culpables el pasado lunes, al inicio del juicio. "Es algo que nada nuevo aporta" decía.
Francisco González: "Se ha renunciado a las pruebas periciales y se ha ahondado en el consumo de alcohol y drogas"
00:16
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/085RD010000000033500/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Además, las defensas han renunciado a interrogar a la chicha, y también han renunciado a que se practiquen el resto de pruebas periciales, entre las que se encontraba el vídeo grabado con el móvil de uno de los acusados.
Mientras, la madre y la hermana de uno de los enjuiciados, testigos de la agresión sexual en la casa de Callosa d'En Sarrià, se han acogido a su derecho a no declarar contra un familiar y sí han respondido a las preguntas de todas las partes, los tres guardias civiles y el agente de policía local que prestaron la primera asistencia y levantaron la primera acta del suceso.
El próximo jueves prosigue la vista con más testigos y previsiblemente las partes elevarán a definitivas sus conclusiones, por lo que quedaría visto para sentencia. El fiscal pide penas entre los 50 y los 52 años de cárcel. Mientras, la acusación particular, ante el reconocimiento de hechos, la rebajará a una petición de entre 18 y 16 años de prisión.
