Gobierno vasco y diputaciones acuerdan por fin una nueva ley de aportaciones

Bilbao

El gobierno vasco y las tres diputaciones forales, tras años de continuos retrasos, han alcanzado finalmente un preacuerdo para renovar la ley vasca de aportaciones, que establece el reparto entre las instituciones vascas de los fondos recaudados en Euskadi a través de los impuestos.

La principal novedad es que el gobierno vasco se llevará una mayor parte de la tarta, ya que el coeficiente vertical pasa del 70'04 % al 70'81 %. Un aumento que se debe a los nuevos traspasos asumidos por el gobierno vasco en los últimos años, lo que incluye el Fondo de Servicios sociales que se amplia de 20 millones a 35. Lo que aporta cada diputación, el coeficiente horizontal, se mantiene como está pero crece el fondo de ajuste para compensar a los territorios que hayan tenido una peor recaudación y que pasa de un máximo del 1 % al 1'45 %.

Aumenta también el dinero que recibirán los ayuntamientos de lo recaudado por tributos concertados, como el IRPF o el Impuesto de Sociedades, que será como mínimo del 39'23 %.

El acuerdo para la nueva ley de aportaciones 2022-2026 se aprobará en una reunión extraordinaria del Consejo Vasco de Finanzas el próximo jueves 15 de julio. Se llevará despues al consejo del gobierno vasco para su aprobación como proyecto de ley y será remitido al parlamento vasco para su aprobación definitiva. Si se tramita a tiempo se podría utilizar ya para elaborar los presupuestos vascos del próximo año.