Nilsa impulsa en Tudela un proyecto que elimina más del 90% de los antibióticos del agua
La planta piloto es pionera en la Unión Europea y surge de una tesis doctoral de un alumno de la Universidad de Zaragoza
Entrevista con Jairo Gómez, técnico de NILSA (15/07/2021)
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Tudela
Los contaminantes emergentes son sustancias que se encuentran en los cauces fluviales y comprenden un rango muy amplio de productos, como pesticidas, medicamentos, café, hormonas o drogas, entre los que los antibióticos resultan relevantes por su peligrosidad para el medio natural. Además, el incremento del número y tipos de resistencias a antibióticos constituye uno de los mayores retos de Salud Pública en todo el mundo.
En la actualidad no se ha limitado por ley ningún parámetro referido a los contaminantes emergentes porque es un tema que ha tenido escaso estudio científico. El proyecto transfronterizo entre España y Francia POCTEFA OUTBIOTICS ha sido, por tanto, pionero en la Unión Europea. Surge de una tesis doctoral de tres años de la Universidad de Zaragoza sobre cómo eliminar estos antibióticos a través de procesos de oxidación, realizada por el ingeniero Samuel Moles y codirigida por Jairo Gómez, responsable de I+D+i de NILSA. Moles ha trabajado en la planta piloto creada específicamente para el proyecto y ubicada en la depuradora de Tudela. Su trabajo en la instalación, recogido en la tesis, demuestra las ventajas de una patente registrada en 2018 por NILSA para la limpieza del agua residual de estas sustancias.
Los ríos en los que se han llevado a cabo estudios para detectar y cuantificar antibióticos, y también bacterias resistentes, son Urumea, Bidasoa, Arba, Arga, Irati, Veral, Subordan, Aragón, Gállego, Ara, Cinca, Segre, Esera, Adour, Garona y Le Salat. Si bien, la idea no es que las depuradoras traten los vertidos antes de devolverlos al río, sino que los sistemas se instalen en los focos de salida del agua contaminada (mataderos, granjas, fincas experimentales, hospitales en el caso de humanos, etcétera).
Adicionalmente, NILSA ha estudiado cómo eliminar los antibióticos en las depuradoras. Para ello ha construido una planta piloto en la planta de Tudela, en la que lleva a cabo ensayos de experimentación con agua contaminada. Para tratarla, combina fotocatálisis con dióxido de titanio y carbón activo. Los ensayos han dado una eliminación de hasta el 90% de la cantidad de antibióticos, incluyendo pruebas con agua residual proveniente de mataderos.
Si bien queda trabajo experimental en el plazo de tres-cinco años, NILSA estudia implementar en un futuro esta tecnología de fotocatálisis como una etapa extra del tratamiento del agua residual en las propias depuradoras.
Iniciado en 2018, el proyecto culminará en diciembre. Ha contado con un presupuesto total de 1.955.730 euros (de los que a NILSA han correspondido 173.000 euros) y ha sido cofinanciado al 65% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER). NILSA gestiona fondos de cohesión desde los años noventa y en treinta años de existencia ha llevado a cabo expedientes europeos por un valor total de 36 millones de euros.